Europa

Vacunación

La mitad de los europeos ya tiene la pauta completa

Bulgaria y Rumanía son los países más rezagados, con coberturas del 15% y el 29% respectivamente

Un sanitario prepara las dosis de la vacuna contra la COVID-19, AstraZeneca,en un centro de vacunaciones en Nápoles
Un sanitario prepara las dosis de la vacuna contra la COVID-19, AstraZeneca,en un centro de vacunaciones en NápolesCIRO FUSCOEFE

Más de la mitad de la población adulta europea ha recibido la pauta completa de vacunación contra el coronavirus, según confirmó ayer la presidenta de la Comisión Europea Ursula von der Leyen. Bruselas se ha marcado como objetivo que el 70% de los mayores de 18 años hayan sido inmunizados a finales de julio y Bruselas está estrechando la presión sobre los Estados miembros para que incrementen el ritmo de pinchazos. La Comisión Europea considera que ha cumplido su parte, ya que los laboratorios han entregado este pasado fin de semana las suficientes dosis para alcanzar este porcentaje.

Las vacunas reposan en la neveras de los países europeos y son las autoridades sanitarias europeas las responsables de inyectarlas. «Para mantenernos seguros de nuevas variantes y evitar una nueva ola de infecciones, es importante estar vacunado», aseguró la presidenta a través de su cuenta de twitter. Bruselas está preocupada por las diferencias en los Estados en el porcentaje de inmunización y las reticencias de ciertos grupos a recibir los sueros, lo que puede ocasionar la emergencia de nuevas variantes. Además, los expertos dudan sobre si llegar al umbral del 70% será suficiente para alcanzar la deseada inmunidad de grupo.

Según los datos del Centro Europeo para el Control y Prevención de Enfermedades (ECDC, por su siglas en inglés), el país con más personas inmunizadas es Malta, que roza el 80% con las dos dosis, seguida de Hungría, con el 63,1%. En el otro lado de la balanza se encuentran Rumanía, dónde tan sólo el 29,2% ha recibido las dos inyecciones, y Bulgaria dónde tan sólo el 15,6% tiene la pauta completa

El primero en prestar atención a los llamamientos de la Comisión Europea para esprintar en el ritmo de vacunación ha sido el primer ministro francés, Emmanuel Macron, que ha declarado la inmunización obligatoria para los sanitarios franceses ( tan sólo el 60% había recibido una dosis de la vacuna a principios de este mes, a pesar de que son un grupo prioritario) y ha hecho que el resto de la población tenga muy difícil esquivarla, ya que será necesario el certificado covid para poder acceder a restaurantes, bares, teatros, cines y medios de transporte. Como modo de que los ciudadanos no decidan optar por una prueba PCR o de antígenos en vez de recibir los sueros, estos test dejarán de ser gratuitos en Francia a partir del otoño.

Por el momento, Francia es el único país junto a Italia y Grecia que por ley ha pasado a considerar obligatoria la vacunación para un grupo de población, pero otros pueden acabar siguiendo su ejemplo. Según la publicación De Morgen, una mayoría de los hospitales y residencias belgas quiere que el país implante una medida similar y cree que debería abordarse en la reunión del viernes del Comité de Concertación

Ante el debate que se abre en muchos países, la Comisión prefiere no intervenir debido a su falta de competencias. «Si la vacunación debe ser obligatoria o no, esta cuestión la debe decidir cada Estado de la UE, la Comisión Europea no toma decisiones así», aseguró el portavoz de Sanidad, Stefan De Keersmaeecker.