Tu botella de agua reutilizable puede ser un nido de bacterias: esta es la forma correcta de limpiarla

Las botellas de agua reutilizables son una excelente opción por muchas razones. No solo aseguran que nos mantengamos hidratados, sino que también ayudan cuidar el medio ambiente. Los residuos de plástico puede tardar miles de años en descomponerse y hasta entonces, son capaces de contaminar todo a su paso.

Gracias a estos recipientes, podemos evitar que millones de botellas de plástico de un solo uso se acumulen en los vertederos y en nuestros océanos. Y es que, sólo una mínima parte de lo que tiramos en el contenedor de basura amarillo (residuos y envases de plástico) llega a reciclarse.

Es por ello, que cada vez son más las personas que prescinden de las botellas de plástico para contribuir a una vida más sostenible. Las botellas reutilizables, normalmente de vidrio, aluminio o acero, se han convertido en una buena alternativa para reducir el consumo de plástico, tanto en casa como fuera, mientras te aseguras de beber la cantidad diaria recomendada de agua.

Sin embargo, no siempre utilizamos este accesorio reutilizable como deberíamos. Si la botella no está limpia, puedes exponerte a que se convierta en un foco de gérmenes y bacterias. La experta en limpieza Leslie Reichert nosda las claves sobre cómo se debe llevar a cabo la limpieza de estas botellas.

Según explica a Mirror, hay indicios para saber cuándo el recipiente se ha convertido en un caldo de cultivo de patógenos, como si el agua comienza a tener un olor o sabor diferente.

“Los gérmenes, el moho y los hongos prosperan en lugares húmedos y oscuros, por lo que el interior de una botella de agua es el lugar perfecto, y por ello debe lavarse después de cada uso”, advierte Reichert.

Los consejos de la experta son rápidos y simples. No importa el material del que esté hecha la botella, debe limpiarse después de cada uso, ya sea usando un lavavajillas o a mano con un cepillo.

Con una botella con tapón de rosca, es importante separar las dos piezas y pasarlas por el lavavajillas cada vez que se use. En el caso de tapones más complicados, su recomendación es utilizar un cepillo especial para limpiar el fondo de la botella y uno más pequeño para la tapa. Después, es importante enjuagar el recipiente con agua muy caliente y dejar secar al aire.

Reichert añade que de vez en cuando, se deben usar pastillas limpiadoras gaseosas, dejando la botella reposando en el agua con la pastilla toda la noche.

“Los gérmenes crecen en las botellas de agua reutilizables después de cada uso. Combinado con el hecho de que el moho y los hongos prosperan en áreas húmedas y oscuras, digamos que este no es un recipiente en el que te gustaría beber nada”, dice Reichert al citado medio.

Además, recuerda el peligro que supone reutilizar las botellas convencionales de plástico, ya que en cada uno de estos recipientes, se pueden acumular hasta 900.000 bacterias.