Brote de ébola

Así será el traslado de Manuel García Viejo a Madrid

Momento de la llegada de Pajares a Madrid.
Momento de la llegada de Pajares a Madrid.larazon

El Gobierno ha iniciado las gestiones para repatriar al hermano Manuel García Viejo, un español que ha sido diagnosticado de Ebola en Sierra Leona y que ha manifestado su deseo de su voluntad de ser trasladado a España, según ha informado el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en un comunicado.

El hermano Manuel García Viejo, de 69 años, es el director médico del Hospital San Juan de Dios en la ciudad de Lunsar y pertenece a la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD).

La de García Viejo será la segunda repatriación desde Africa que haga el Gobierno de un español infectado por Ebola, tras la del también religioso Miguel Pajares, que fue trasladado a España desde Monrovia (Liberia).

Todo hace indicar que la logística del traslado será similar, de modo que el procedimiento sería el siguiente:

El viaje se realizará en un Airbus A310 medicalizado del Ejército del Aire, que ya trasladó a Pajares. El avión irá equipado con todas las medidas médicas y de seguridad para evitar contagios a la tripulación y el personal médico que viaje con él.

Una vez aterrice en Madrid, en base de Torrejón de Ardoz, el religioso será introducido en una ambulancia para trasladarle al hospital. Si en el caso de Miguel Pajares fue el Carlos III de Madrid, en este caso el elegido podría ser el Hospital Universitario La Paz.

El dispositivo de seguridad estará formado por vehículos de la Policía Nacional y la Guardia Civil, así como ambulancias del SUMMA equipadas con medios de aislamiento biológicos, para trasladar al enfermo y a parte del equipo médico que les acompañe durante el traslado.

En el caso del padre Pajares, las ambulancias, cuyos conductores irán protegidos con trajes especiales y mascarillas, entraron al hospital Carlos III por una puerta diferente a la de acceso al centro: el acceso a los institutos de Investigación Cardiovascular y Oncológicos, que se encuentran dentro del recinto hospitalario, desde donde accedió a un edificio con acceso directo a la sexta planta, donde se encuentran tres habitaciones individuales de aislamiento con esclusas con presión negativa.

El sacerdote será trasladado hasta la habitación del hospital dentro de las cápsulas de aislamiento en las que habrá viajado en el Airbus.

En el hospital elegido finalmente estarán activados, al igual que en el caso anterior, los protocolos marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que garantizan un riesgo mínimo para la atención a los pacientes con este tipo de enfermedades infecciosas.