Brotes de dengue en Ibiza: qué es el dengue, cuáles son sus síntomas y qué riesgo hay de nuevos casos

Alemania ha comunicado a las autoridades sanitarias españolas dos casos de dengue (1 confirmado y 1 probable), junto con 4 casos compatibles con vínculos epidemiológicos, en personas que habían estado en Ibiza durante el periodo de incubación en agosto y octubre del año pasado.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha destacado este jueves que desde el Ministerio de Sanidad se está "monitorizando" la situación de riesgo de la enfermedad. "Estamos monitorizando la situación, como hacemos siempre", ha afirmado, al tiempo que ha señalado que "si la pandemia -del coronavirus- nos ha enseñado algo es que una de las grandes lecciones es la importancia de la vigilancia en salud pública, monitorizar, coordinar y anticiparnos; y en ello estamos trabajando conjuntamente desde el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Ministerio de Sanidad con todas las redes de vigilancia de nuestro país".

El CCAES considera que, por ahora, el riesgo de que aparezcan nuevos casos autóctonos de dengue en Ibiza es bajo, pero será moderado a partir de mayo, cuando comience el periodo de actividad de uno de los mosquitos vectores de la enfermedad presente en el país.

Como se desprende del documento del CCAES, el caso confirmado es una mujer de 27 años que estuvo en agosto 2022 en Ibiza junto a su pareja e hija de 14 meses. Los tres iniciaron síntomas el 31 de agosto, pero sólo se realizaron pruebas en la mujer, en la que el diagnóstico de dengue se confirmó mediante la detección de anticuerpos IgM específicos y de antígeno viral. El caso probable es una mujer de 37 años que viajó junto a su pareja e hijo de 9 años en octubre 2022. Inició síntomas el 13 de dicho mes, su hijo el 12 y su pareja el 15 de octubre.

Qué es el dengue y cómo se transmite

Según informa la Organización Mundial de la Salud, el dengue es una infección víricatransmitida a las personas por la picadura de mosquitos hembras infectados que en los últimos años se ha propagado rápidamente a todas las regiones. Los principales vectores de la enfermedad son los mosquitos Aedes aegypti y, en menor medida, Ae. albopictus, conocido como mosquito tigre. Estos insectos también son vectores de los virus de la fiebre chikungunya, la fiebre amarilla y el Zika.En España, el mosquito "Aedes albopictus", esta presente en toda el área mediterránea y las islas Baleares y en algunas zonas del interior y norte del país. En la isla de Ibiza se detectó por primera vez en 2014 y desde entonces se considera establecido en toda la isla.

El virus que causa esta enfermedad es el virus del dengue (DENV). Existen cuatro serotipos del DENV, lo que significa quees posible infectarse cuatro veces. Se cree que la recuperación de la infección otorga inmunidad de por vida contra el serotipo que ha causado la infección. Sin embargo, la inmunidad cruzada a los otros serotipos tras la recuperación es parcial y temporal. Las infecciones posteriores (secundarias) causadas por otros serotipos aumentan el riesgo de padecer el dengue grave. El dengue presenta cuatro cuadros epidemiológicos diferentes, asociados a cada uno de los serotipos. Los cuatro pueden circular simultáneamente en una misma región, y de hecho son hiperendémicos en muchos países, informa la OMS.

El dengue se presenta en los climas tropicales y subtropicales de todo el planeta, sobre todo en las zonas urbanas y semiurbanas. Sin embargo la incidencia de la enfermedad ha aumentado enormemente en las últimas décadas, y actualmente alrededor de la mitad de la población mundial corre el riesgo de contraer esta enfermedad. Se estima que hay entre 100 y 400 millones de infecciones cada año, si bien más del 80% de ellas son generalmente leves y asintomáticas. Es causante de un amplio espectro patológico, que puede abarcar desde una enfermedad asintomática (es posible que la persona no se percate de la infección) hasta síntomas graves similares a los de la gripe en las personas infectadas. Si bien es menos frecuente, algunas personas evolucionan hacia un dengue grave, que puede entrañar un número indeterminado de complicaciones vinculadas a hemorragias graves, insuficiencia orgánica o extravasación de plasma. El dengue grave conlleva un mayor riesgo de muerte si no se trata debidamente.

Síntomas de la enfermedad

Aunque la mayoría de los casos son asintomáticos o presentan síntomas leves, el dengue puede manifestarse como una enfermedad grave de tipo gripal que afecta a lactantes, niños pequeños y adultos, aunque raras veces resulta letal. Los síntomas se presentan al cabo de un periodo de incubación de 4 a 10 días después de la picadura de un mosquito infectado y duran por lo común entre 2 y 7 días. La OMS clasifica el dengue en dos categorías principales: dengue (con o sin signos de alerta) y dengue grave.

Síntomas del dengue

Fiebre elevada de unos 40 °C acompañada de dos de los siguientes síntomas durante la fase febril (2 a 7 días):

• dolor de cabeza muy intenso
• dolor detrás de los globos oculares
• dolores musculares y articulares
• náuseas
• vómitos
• agrandamiento de ganglios linfáticos
• sarpullido

Síntomas de dengue grave

El paciente entra en lo que se denomina fase crítica por lo general de 3 a 7 días después de iniciarse la enfermedad. Durante las 24-48 horas de la fase crítica, una pequeña parte de los pacientes puede manifestar una rebaja repentina de los síntomas. Es en este momento, al remitir la fiebre en el paciente (de 40 °C a por debajo de 38 °C), cuando pueden aparecer los signos de alerta asociados al dengue grave, una complicación potencialmente mortal porque cursa con extravasación de plasma, acumulación de líquidos, dificultad respiratoria, hemorragias graves o fallo orgánico .Según la OMS, el personal médico debería buscar signos de alerta como los siguientes:

• dolor abdominal intenso
• vómitos persistentes
• respiración acelerada
• hemorragias en las encías o la nariz
• fatiga
• agitación
• agrandamiento del hígado (hepatomegalia)
• presencia de sangre en el vómito o las heces

Tratamiento del dengue

No hay tratamiento específico para el dengue. Los pacientes deben guardar reposo, mantenerse hidratados y buscar asesoramiento médico. Para controlar los dolores musculares y la fiebre se pueden tomar tratamientos sintomáticos como los antifebriles y los analgésicos. Deben evitarse los AINE (antiinflamatorios no esteroideos), como el ibuprofeno y la aspirina. Estos medicamentos antiinflamatorios tienen un efecto anticoagulante, y en una enfermedad con riesgo de hemorragias pueden empeorar el pronóstico.

La detección precoz del empeoramiento de la enfermedad asociada al dengue grave, y el acceso a atención médica adecuada, reduce las tasas de letalidad del dengue grave a menos del 1%.