Prensa Internacional

El espionaje a AP un «enorme revés» a la libertad de prensa en EE.UU

El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) protestó por el espionaje telefónico del Gobierno de Obama a la agencia de noticias AP

El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ) protestó hoy por el espionaje telefónico del Gobierno de Barack Obama a la agencia de noticias AP al considerar que supone un "enorme revés"para la libertad de prensa en EE.UU.

"Rara vez hemos tenido que alzar la voz de manera colectiva para denunciar acciones del Gobierno (estadounidense) que amenazan el trabajo periodístico, pero hoy nos vemos obligados a hacerlo de manera contundente", reseña una carta del CPJ dirigida al fiscal general, Eric Holder.

Los miembros de la junta directiva de la organización afirman que el alcance "excesivamente amplio"del espionaje telefónico y la falta de notificación a esa agencia es un "enorme revés"para la libertad de prensa en Estados Unidos.

"Compartimos la preocupación de la agencia AP y nos unimos a su petición para que se devuelvan los materiales confiscados y los originales destruidos", añade la directiva del CPJ, de la que forma parte la directora ejecutiva de ese medio informativo, Kathleen Carroll.

Para el CPJ, las acciones del Departamento de Justicia socavan la libertad de prensa en EE.UU. y representan un "ejemplo terrible"para el resto del mundo donde los gobiernos justifican de forma rutinaria su intervención a los medios citando la seguridad nacional.

El Departamento de Justicia recopiló de forma secreta los registros de 20 líneas telefónicas correspondientes a abril y mayo de 2012, incluidas líneas de las oficinas de AP en Nueva York y Washington y teléfonos privados de periodistas de la agencia.

La Administración Obama sostiene que esas medidas extraordinarias buscaban descubrir al responsable de una filtración "muy seria"que, según la versión de la Casa Blanca, "puso en peligro la vida de estadounidenses".

"Le urgimos para que de forma inmediata dé pasos para garantizar que la prensa puede realizar su función crítica sin la innecesaria intromisión del Gobierno", añade la organización de defensa de la libertad de prensa, con sede en Nueva York.

El CPJ pide que las autoridades comuniquen en el futuro a los medios de comunicación cualquier acción de este tipo para que pueda ser dirimida en los tribunales.

Este caso de espionaje remarca las ya tensas relaciones del Gobierno del demócrata Obama con los medios y ha llevado a algunos a comparar sus políticas con las del republicano Richard Nixon (1969-1974).

Esta semana también se conoció que el corresponsal jefe en Washington del canal conservador de noticias Fox News fue espiado en 2010 por dar a conocer información que le aportó una fuente del Departamento de Estado.