Los instaladores desmienten a Industria

Soria asegura que «nadie dejará de ver la televisión por el proceso de adaptación»

Siguen las disparidades entre el Ministerio de Industria, Energía y Turismo y los gremios de intaladores y administración de fincas acerca del proceso de adaptación de antenas que conforma el Plan Técnico de la Televisión Digital Terrestre. José Manuel Soria aseguró ayer durante la Sesión de Control del Gobierno en el Congreso de los Diputados que «nadie dejará de ver la televisión en ningún momento del proceso en España». Ante esta aseveración el portavoz de la Federación Coordinadora de TeleComunicaciones (Fecotel), José Manuel Muñiz, afirma que es «facilmente rebatible». En la sesión de Control, la diputada socialista Lourdes Muñoz advirtió de que, según las estimacones, d e los instaladores, 300.000 edificios no se podrán adaptar al dividendo digital antes de la fecha impuesta por Europa, el 31 de diciembre de este año, lo que supone que 7,5 millones de personas dejarán de recibir en sus casas algunos de los canales. Desde Fecotel, Muñiz asegura que no se están teniendo en cuenta todas las variables. «Una cosa es adaptar la instalación. Pero el problema es también de cobertura, porque muchas poblaciones dependen de centros locales para recibir la señal, las llamadas «zonas de sombra» (a donde no llega la señal), y los centros de extensión de cobertura necesitan de emisores mayores y en ambos casos no han empezado a adecuarse al dividendo». Sin embargo, Soria aseguró que si uno no resintoniza «va a recibir la práctica totalidad de la oferta, salvo tres canales que los operadores privados han decidido que sean esos porque son los que menos audiencia tienen». A dichos tres canales habría que añadir los problemas que también causará en TVE y en varias autonómicas.

Soria También achacó el retraso de la implantación del dividendo al Gobierno del PSOE, que «asignó a dedo y sin concurso» nueve canales de TDT. «Me parece de vergüenza porque está claro que el anterior Ejecutivo metió la pata con esa decisión, pero en noviembre de 2012 ya salío la normativa europea. Incluso con la excusa de que la sentencia era recurrible, el fallo se hizo efectivo en enero, con lo que hubiéramos tenido casi un año para tomar medidas y no sólo tres meses». En la actualidad, se estima que la adaptación sigue a un ritmo lento. En Andalucía el proceso va por el 9%, la más lenta, y en Barcelona sobre el 17%, lo que sigue dejando una media del 10%, muy despacio para el poco tiempo que queda. Mientras, los instaladores siguen embotados con el aluvión de llamadas, que explica José Manuel Muñiz: «En Andalucía contestamos una media de 50 diarias acerca de dudas ciudadanas, pero también de instaladores, administradores de fincas y propietarios, a las que hay que sumar los correos electrónicos». El panorama continúa pues en el mismo punto y aunque hay una reunión la semana que viene, Fecotel asegura que «nuestras propuestas no interesan porque su plan es el mejor y ya». Incluso en el sector se habla de que se están buscando componentes de importación «que no serían homologables con los nuestros».