Desmantelan una banda que transformaba coches de gama media en Ferraris

Los responsables de la red vendían los falsos Ferraris principalmente a través de internet por valores cercanos a los 40.000 euros, cuando los auténticos superan los 200.000

La Policía Nacional ha desarticulado un grupo de falsificadores que transformaba coches de gama más baja en Ferrariscon un simple cambio de chasis que llevaban a cabo en un taller clandestino de Sils, según informa la Policía Nacional.

La operación sigue abierta y el caso está bajo secreto de sumario, aunque fuentes próximas a la investigación informan de la detención de dos personas, una que quedó libre tras declarar y otra que pasó a disposición del Juzgado de instrucción de guardia de Santa Coloma de Farners (Gerona).

Por el momento, los agentes responsables del dispositivo, procedentes de la Unidad de Delitos Económicos y Financieros (UDEF) de Barcelona y de otras unidades de la zona, han decomisado una decena de vehículos en diferentes fases de transformación a supuestos Ferrari.

Los investigadores del Cuerpo Nacional de Policía (CNP) entraron este martes en un taller de Sils que hace poco más de un mes se instaló de forma clandestina en el polígono de esta localidad y del que sabían que llevaba a cabo esta actividad ilícita.

En el operativo se detuvo a los dos trabajadores que estaban en aquel momento en el taller como presuntos autores de un delito contra la propiedad industrial y estafa.

Los agentes de policía se incautaron además de una decena de vehículos a medio falsificar, que fueron trasladados a un depósito municipal.

Los responsables de la red vendían los falsos Ferraris principalmente a través de internet por valores cercanos a los 40.000 euros, cuando los auténticos superan los 200.000.

La investigación apunta a que el grupo desmantelado en Sils no sólo se dedicaba a la falsificación de los vehículos, sino que también los comercializaba.

Desde la Policía Nacional aseguran que la operación sigue abierta y que no se descartan más detenciones, que podrían ser posibles colaboradores que cobraran por su participación puntual en el proceso de falsificación.

Los investigadores también analizan cuántos compradores han caído en esta estafa.

Efe