Dos de cada diez adolecentes reconoce haber tenido algún problema en la red

Siete de cada diez adolescentes admiten que no tienen control horario, que se conectan por las noches y que tienen libre acceso para navegar en Internet.

Dos de cada diez adolescentes españoles admite haber tenido algún problema en internet, como el acoso por parte de amigos o de la pareja y la "sextorsión"como consecuencia del intercambio de fotos comprometidas. Esta es una de las principales conclusiones de un estudio realizado por la Fundación Alia2 entre los más de 1.000 adolescentes formados por la fundación en 2014. Según explica la ONG en un comunicado, siete de cada diez adolescentes admiten que no tienen control horario, que se conectan por las noches y que tienen libre acceso para navegar en Internet.

El creciente uso de ‘tablets’ y ‘smartphones’ ha aumentado el uso de la red en los más jóvenes. Casi el 100% de los adolescentes españoles tiene un "smartphone"y la media de edad a la que acceden a ellos se sitúa en los 11 años. Alia2 añade que "además de esta peligrosa puerta a Internet a una edad sin la suficiente madurez", otro de los problemas existentes "es la brecha que sigue existiendo entre los adolescentes y sus mayores, ya sean padres o personal docente, con los que también comparten gran parte de su vida diaria".

El 63% de los menores soluciona sus dudas con amigos y hermanos, frente a un 37% que acude a sus padres. Sin embargo, cuando se trata de solucionar un problema los valores se invierten: el 40% se dirige a amigos y hermanos y el 60% a sus padres. Solo el 2% de los adolescentes encuestados admite que se dirige a un docente cuando tiene una duda o problema en la Red. “Si bien los datos van mejorando año tras año en cuanto a concienciación de los menores sobre el uso correcto de la tecnología, queda mucho por hacer aún, especialmente, con la concienciación a padres y docentes” asegura Elena Bragado, directora general de Fundación Alia2.

“Estamos detectando un cambio de tendencia en cuanto a la concienciación sobre los peligros de Internet y las nuevas tecnologías”, señala Bragado. “Los jóvenes empiezan a estar mejor informados. Policía, Guardia Civil y organizaciones como Fundación Alia2 llevamos tiempo trabajando para que los menores sean conscientes de los riesgos que encierra la red. El problema presente son los adultos. Son los padres los que tienen que evitar el acceso sin restricciones a Internet. Son ellos los que deben prohibir a sus hijos que se conecten de noche y controlar de manera adecuada las horas que pasan en la Red. Esto, los adultos no lo hacen si no saben las consecuencias de su dejadez”.

Fundación Alia2 y Kaspersky han comenzado este curso escolar un proyecto para acercarse a padres y docentes. La fórmula del proyecto Familia Segura está siendo “muy bien acogida por reunir educación y tecnología, todo al servicio de los adultos. Que un hijo navegue protegido por Internet o utilice de manera correcta las diferentes redes sociales hace que la familia tecnológica esté segura. Nuestros ordenadores, iPads, ‘tablets’, ‘smartphones’, etc necesitan una protección, pero para proteger algo primero hay que saber qué es lo queremos proteger”, apunta la directora general de la fundación.

Para Bragado, “la familia escolar y la formada por padres e hijos necesitan ese diálogo tecnológico que desde Fundación Alia2 defendemos sobre todo lo demás para prevenir. La mejor prevención es la educación y no necesitamos ser expertos en tecnología, los adolescentes son los expertos, los nativos digitales. Nosotros somos los expertos en la vida offline y la primera lección a enseñar es que online u offline nuestra identidad, nuestra imagen es una. Enseñarles que los problemas que surgen en Internet son reales”.

Los menores, afirma la directora de la fundación, “deben ser escuchados y es un compromiso actual no solo en Europa sino en todo el mundo. Ellos tienen mucho que contar y piden ser tomados en cuenta. Por ello, hoy, con motivo de este día publicamos un código de conducta en el entorno escolar, elaborado por cerca de 1.000 estudiantes de entre 14 y 17 años de la Comunidad de Madrid. Un código con el que recuerdan a sus progenitores y a sus docentes que, como en todo, deben darles ejemplo”.

“Entre todos –concluye Elena Bragado– podemos hacer un Internet mejor y desde Fundación Alia2 apostamos por el diálogo tecnológico en la familia, la educación en valores y el uso de herramientas de protección para una familia segura, para una sociedad actual y futura segura”.