Cirugía

El primer trasplantado de pene va a ser padre en 2015

Imagen de un equipo de médicos en un quirófano
Imagen de un equipo de médicos en un quirófanolarazon

El hombre que se convirtió en el primer paciente que recibía un trasplante de pene será padre este año. Según informó News24 de Suráfrica, los cirujanos acaban de ser informados de que la novia del paciente estaba embarazada.

La noticia llega tan solo seis meses después de la intervención a un joven de 21 que había perdido su órgano debido a una infección provocada tras una ceremonia de circuncisión. El profesor de Urología de la Universidad de Stellenbosch, Andre van der Merwe, responsable de coordinar al equipo que hizo historia con esta operación, explicó que el pasado mes de marzo que este tipo de operaciones son necesarias porque los miembros de la etnia xhosa, practican a menudo la circuncisión de adultos y las malas condiciones en las que se realiza esta práctica provoca unas 250 amputaciones cada año.

Para poder utilizar el pene que ahora ha facilitado este embarazo, el equipo de van der Merwe tuvo que realizar un injerto de piel abdominal en la operación. Sin embargo, esta situción puede que no se repita gracias a los avances tecnológicos. El año pasado, los investigadores informaron que habían logrado reproducir células del propio receptor en el laboratorio lo que facilita la operación, evita el rechazo y evita el tener que hacer un injerto.

"No es poca cosa volver a colocar un órgano. Y si se trata de órganos sexuales, aún más porque tiene muchas implicaciones psicológicas. Si la función (urinaria y sexual) y la apariencia no son adecuadas, el destinatario tiene que lidiar con las implicaciones de tener un objeto extraño en su cuerpo en lugar de un pene. Incluso si todo está funcionando físicamente, el trauma psicológico a veces puede ser demasiado difícil de soportar. Eso es lo que pasó con el paciente chino que podría haber sido el primer trasplantado con éxito en 2006, pero 10 días después el hombre pidió a los médicos que se lo retiraran porque no podía soportarlo psicológicamente"

Van der Merwe y su equipo continúan supervisando al joven y en los próximos meses volverán a intervenirle para mejorar la funcionalidad del órgano.