Alimentación

Esta es la diferencia entre cerezas y picotas, según un frutero

Se trata de dos frutas muy parecidas pero que son diferentes variedades y tienen sabores distintos

Esta es la diferencia entre cerezas y picotas según un frutero
Esta es la diferencia entre cerezas y picotas según un fruteroLa Razón

Ahora que estamos en pleno verano es cuando más consumimos alimentos frescos como el melón, sandía, ciruela o cerezas. Estas últimas son muy consumidas en nuestro país y en gran parte se debe a que en España se planta esta fruta tan codiciada.

Sin embargo, hay una gran confusión entre las cerezas y otra fruta muy parecida, las picotas. Cuando acudimos al supermercado, si no nos fijamos en las etiquetas, es prácticamente imposible diferenciarlas a simple vista, por lo que conocer sus detalles te hará saber cuál es cuál.

Esta es la diferencia entre las cerezas y las picotas

Un frutero a través de sus redes sociales conocido como @fruterotiktokero explica la diferencia entre estas dos frutas tan parecidas. Según explica, "la picota no tiene rabito, es mucho más dulce y también más crujiente".

A parte, también podemos diferenciarlas por su momento de cultivo. "La picota es más tardía, empieza antes la cereza que la picota". La temporada de cerezas comienza desde finales de abril, hasta finales de julio llegando e incluso a agosto. Sin embargo, la temporada de picotas comienza a mediados de junio extendiéndose a finales de agosto.

En otro vídeo paralelo en el que también habla sobre estas dos frutas, explica como elegir las mejores. "Hoy te enseño a elegir las cerezas como un pro. Si el rabito está verde significa que están frescas, si estuviera seco significa que ya llevan bastante tiempo cosechadas".

"Si brilla y está tersa, esta en su mejor momento" Por otro lado aclara que "cuanto más oscura más dulce, cuanto más rojita un poquito más ácidas, dependiendo de la variedad".

Cómo conservar las cerezas

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), junto con expertos en nutrición y conservación alimentaria, coinciden en que el secreto para mantener las cerezas frescas pasa por saber dónde, cómo y cuándo refrigerarlas, además de evitar errores comunes como lavarlas al llegar a casa o dejarlas expuestas al sol.

Las cerezas son unas frutas particularmente sensibles al calor. Aunque puedan parecer resistentes, una temperatura elevada acelera su maduración y deterioro. Por eso, salvo que se vayan a consumir en el mismo día, lo recomendable es guardarlas en la nevera lo antes posible.

Eso sí, hay matices importantes: nunca hay que refrigerarlas recién lavadas, ya que la humedad acelera la aparición de moho y ablanda la piel. Lo ideal es guardarlas tal cual, sin lavar, y hacerlo en un recipiente amplio, preferiblemente forrado con papel de cocina para absorber la humedad que puedan soltar.

Beneficios de las cerezas

La cereza tiene una gran cantidad de beneficios para nuestro organismo, debido a su gran contenido en potasio, un mineral que favorece la formación de orina, y también por su contenido en fibras.

Las cerezas tienen propiedades antinflamatorias gracias a sus componentes depurativos y antioxidantes, así como la presencia de ácido salicílico, que ayuda a tratar el acné al reducir la inflamación y el enrojecimiento al destapar los poro obstruidos de la piel.

Se recomienda en dietas cuya finalidad es bajar de peso, pro su efecto saciante, laxante y diurético. Gracias a su contenido en fibra, agua y potasio, así como al bajo aporte de lípidos y sodio.

Por último, hay que aclarar que aquellas cerezas que son más oscuras son las más ricas en hierro, magnesio y potasio que las variedades que son más claras.