La «defensa de la vida» del PSOE: un aborto cada cinco minutos

LA RAZÓN accede al último informe de Sanidad, que revela que en 2012 se interrumpieron 112.390 embarazos, el 12,15%, entre las menores. En los últimos diez años se ha disparado un 40.8% el número de interrupciones del embarazo superando el millón

La lacra del aborto no tiene freno. Sólo en 2012 se produjeron 112.390 interrupciones voluntarias del embarazo, según el Informe que anualmente elabora el Ministerio de Sanidad y al que ha tenido acceso LA RAZÓN. De esta manera, cada día se practican 308 abortos en nuestro país, o lo que es lo mismo, un aborto en poco menos de cinco minutos.

Aunque es cierto que en términos brutos el número de abortos ha descendido con respecto a 2011, cuando se ejecutaron 118.359 intervenciones, no menos cierto es que en este tramo temporal también ha disminuido la población en nuestro país. Eso permite deducir que en si se analiza de acuerdo a las tasas por 1.000 mujeres, las interrupciones del embarazo se han estancado, pasando de un 12,44 en 2011 al 12,01 del pasado año. En cualquier caso, lo cierto es que si se echa la vista atrás, el aborto se ha convertido en un problema que, lejos de frenarse, va a más. Así, tomando como referencia las 79.788 interrupciones del embarazo en 2003, en esta última década han aumentado un 40,8% sumando un total de 1.041.241 mujeres que han abortado en España.

La Ley del Aborto diseñada por el Gobierno socialista y abanderada por la entonces ministra Bibiana Aído, ha traído consigo desde su puesta en marcha un total de 230.749 abortos en nuestro país. Tomando como punto de partida que la normativa establecía que el feto de 13 semanas era un ser vivo pero no un ser humano, abrió las puertas al aborto libre hasta la semana 14, un plazo que se podía dilatar hasta la 22 en caso de riesgo de vida o salud para la madre o graves anomalías del feto. En estos dos años de vigencia de esta normativa el 90 por ciento de los abortos se llevaron a cabo precisamente dentro de las 12 primeras semanas del embarazo. Así, en cuanto a los motivos, a nueve de cada diez se les dio el visto bueno «a petición de la mujer», mientras que el 5,67 por ciento se practicó argumentando un grave riesgo para la vida o la salud de la embarazada, frente al 2,78% que representan aquellas interrupciones por las anomalías del feto.

Por otro lado, nueve de cada diez abortos se realizaron en centro privados, lo que invita a hacerse una idea de la oposición que puede general en el colectivo de clínicas abortistas la nueva ley del Gobierno que busca acabar con el «coladero» ante los anteriores supuestos y plazos, de un negocio que mueve al año unos 58 millones de euros. Desde la pasada edición, el Ministerio de Sanidad realiza una radiografía que dibuja el perfil de la mujer que interrumpe su embarazo. Así, el 48,99% de ellas convivía con su pareja en el momento de abortar de forma voluntaria, mientras que el 21,81% vivía sola y un 24,51 residía con sus padres u otros familiares. Se da la circunstancia de que mientras el 45,33% de las mujeres no tiene ningún otro hijo, el 54,67% ya ha sido madre.

Si nos detenemos en analizar las mujeres que dan por primera vez este paso en su vida, se alcanza el 63,83 por ciento, mientras que el 24,46 aborta por segunda vez, mientras que aquellas que ya han sido intervenidas por este motivo en dos o tres ocasiones representan 10 de cada 100 casos. En cuanto al nivel de formación, el 36,35 de las mujeres que abortaron en 2012 tenía el título de Secundaria, un 26,1% el de Bachillerato o FP equivalente, mientras que este porcentaje disminuye hasta un 12,85 si hablamos de quienes tienen estudios universitarios. Sobre su situación laboral, aquellas que son trabajadoras por cuenta ajena, esto es, asalariadas, constituyen el principal grupo de quienes deciden abortar –un 46,82%-. Sí hay un repunte en las mujeres en paro que deciden interrumpir su embarazo, que pasan de un 23,13% en 2011 a un 26,81% en 2012.

13.658 menores de 20 años abortaron

Al analizar los diferentes rangos de edad, el sector de población más afectado es el de las mujeres de entre 25 y 29, con un total de 25.584 interrupciones del embarazo, seguido del grupo entre 30 y 34 –24.298– y las que tienen entre 20 y 24 –24.339–. Llama especialmente la atención que el número de jóvenes y adolescentes entre 15 y 19 años que deciden dar este paso llegue hasta los 13.198. Pero, sobre todo, resulta preocupante que el único colectivo que crece es el de las menores de 15 años, que llegan a las 460, una tendencia al alza que se viene produciendo en los últimos dos años –426 en 2010 y 455 en 2011–. Así, cada día abortan en nuestro país 38 menores de 20 años, de las cuales una es a una menor de 15 años. En total, son 13.658 menores de 20 años quienes dieron este paso adelante, precisamente el colectivo más afectado por una de la medidas más polémicas de la «ley Aído», que permitía abortar sin necesidad de permiso paterno a quienes hubieran cumplido 16 años. Con la nueva normativa, la menor tendrá que contar con el consentimiento expreso de sus padres o tutores. Es más, en caso de conflicto con sus progenitores ante un aborto, será un juez de Primera Instancia quien tenga la última palabra en un procedimiento de tramitación urgente y preferente. Así, la decisión judicial no será sobre la pertinencia de practicar el aborto a la menor, sino si tiene madurez

Madrid y asturias, a la cabeza de casos

La Comunidad de Madrid lidera el ranking por autonomías. Así, en la región, la tasa de aborto alcanzó un 14,90 por cada mil mujeres, seguida del Principado de Asturias -14,34-, Cataluña -14,28-, Región de Murcia -13,32- y Andalucía -13,08-. Por el contrario, la comunidad autónoma que registra un menor tasa de abortos es Navarra -2,15 por cada mil mujeres, un descenso más que significativo respecto al 6,90 del año anterior-, seguida de La Rioja -4,83-, Galicia -7,01- y Extremadura -7,20-. Además, cabe destacar cómo se ha duplicado la tasa de abortos en la última década tanto en Canarias como en Cantabria. Respecto a la nacionalidad, seis de cada diez mujeres son españolas, mientras que el 20,5 ciento de las mujeres tiene nacionalidad americana y cerca de un 10% es inmigrante procedente de otros países de Europa.