La emotiva carta de Antonio del Castillo a su hija el día que cumpliría 25 años

"Sé que nunca leerás esta carta (...), así pues te contare que en estos siete años ya desde que no estas con nosotros, ya ninguno somos los mismos yo por mi parte te diré que estoy muy desengañado con todo", reconoce Antonio.

La vida de los padres de Marta del Castillo cambió ese 24 de enero de 2009, cuando la menor bajó a encontrarse con Miguel Carcaño y no regresó. En ese momento comenzó una lucha por saber la verdad de lo que ocurrió aquella noche, para intentar incriminar a los culpables y, lo más importante, arrancó una pelea por poder reencontrarse con su hija. A día de hoy, el matrimonio del Castillo no es el mismo. Durante este largo calvario, han sufrido numerosos reveses judiciales, no han logrado que todos los implicados en la muerte de su hija (según defienden ellos) estén entre rejas, han recibido promesas que no se han cumplido de las más altas instancias políticas y, lo que más desespera a la familia, la búsqueda de su hija está en un punto muerto. Por el caso han pasado ya muchos agentes y han barajado cientos de hipótesis pero la realidad es que todavía no han podido reencontrarse con su hija.

Todos este proceso ha cambiado su forma de ver la vida y su confianza en las instituciones, pero no han logrado menoscabar lo único que les queda, la esperanza. Una esperanza que les mantiene vivos en la lucha por encontrar a su hija y que no les detendrá hasta el último de sus días.

Antonio del Castillo no ha podido volver a Marta desde su desaparición pero ha querido escribirle una carta para felicitarla en el día en el que habría cumplido 25 años y para explicarle lo que ha pasado durante todo este tiempo. En su perfil de Facebook, Antonio le explica que seguirán luchando toda la vida para encontrarla pero durante estos siete años de ausencia ha aumentado su frustración, su forma de ver la vida y le ha convertido en un descreído. "Ninguno somos los mismos yo por mi parte te diré que estoy muy desengañado con todo, empezando con los valores que siempre quise inculcaros, como el respeto a la ley e incluso a la figura que representa un uniformado", indica Antonio.

El padre de Marta explica que "me he dado cuenta que todo es política, que existen varios tipos de justicia y que no es igual para todos, que dependiendo quien te mate los castigos y tus derechos son totalmente distintos, aunque el fin sea el mismo: la muerte, si mueres por un terrorista la ley te ampara hasta en las redes sociales, por violencia de genero las penas son mayores y se les aplica más atenuantes del delito. Pero si es por violencia común, entonces es como si fuese algo de pobres o más generalizado, en fin que la justicia es para quien tiene amistades o mucho poder".

Sobre las Fuerzas de Seguridad del Estado en las que confió durante tanto tiempo y a las que defendió a capa y espada, afirma que "tenemos una policía de verde que parece ser que es la más efectiva, la que los jueces cuando llevan casos importantes como de corrupción política o un buen caso es la que piden estos para hacer sus investigaciones con buenos resultados y de la que se fían, después tenemos la policía política, como yo la llamo la que a los mandos los ponen los políticos, la que los ascensos suelen ser por el partido que gobierna y la que cuando fracasan en un caso, los ascienden para cambiarlos de sitio, y siento decirte que esto es lo que ha pasado con tu caso, como eres de violencia común ningún juez velara por tus derechos y te insultan en las redes sociales y ni siquiera se molestan en investigar las denuncias que pongo".

Asimismo, le explica a Marta que "tu caso lo lleva un grupo nuevo que se llama «Brigada de Revisión de Casos» de los que no sé nada de nada desde que cogieron el caso, después de un estrepitoso fracaso de tu búsqueda, y aunque este grupo sea nuevo parece ser que no va a durar mucho pues algún diario ha publicado que han estado investigando a políticos sin orden judicial, como se come esto, la policía política investigando a los políticos, en fin no será que no he pedido veces que tu caso lo llevase la policía de verde, pero hija tu padre es un españolito más de a pie, y la policía política se cansó de buscarte porque ya no sabía que más hacer y tiro la toalla. No te preocupes que tus padres seguiremos buscándote y aunque algún día tenga que hacer lo que no está escrito para encontrarte, se hará".