Las denuncias al Defensor del Profesor por acoso, amenazas y agresiones caen un 20%

Las llamadas de profesores al teléfono del Defensor del Profesor del sindicato docente ANPE se han reducido un 20 por ciento respecto al año pasado hasta las 2.671 consultas, pero aumenta la gravedad de los casos, sobre todo los relacionados con faltas de respeto (un 8% más) o las agresiones de padres a profesores (un 2% más) o los problemas para dar clase (4% más). Estas son las principales conclusiones del informe Defensor del Profesor en el curso 2014-2015, un servicio que ANPE puso en marcha hace una década y que ha atendido a un total de 28.328 llamadas de docentes, casi 3.000 al año. Por primera vez desde que se puso en funcionamiento este servicio, se equiparan los casos de profesores de Infantil y Primaria y los de Secundaria y Formación Profesional.

"Hay menos llamadas, pero los casos que hay son de mayor gravedad", ha aseverado el presidente nacional de esta organización, Nicolás Fernández Guisado, que ha calificado de "positivo"este descenso de consultas como resultado, a su juicio, "de la mejora de la convivencia en las aulas", que ha vinculado a la puesta en marcha de las leyes de autoridad del profesor o los decretos autonómicos de convivencia.

Fernández Guisado apunta que los recortes educativos -como el aumento de las ratios o la eliminación de aulas de refuerzo-, la reducción de más de 28.000 profesores y el aumento de casi 400.000 alumnos, son la causa de la mayoría de problemas que plantean las personas que hacen uso de este servicio.

Repunte de bajas

Otro de los aspectos que revela el estudio es que los profesores presentan más problemas de ansiedad (un 4% más que el curso pasado) y que se han dado de baja un total de 324 (un 2%). Según han explicado los responsables de este informe, Crisálida Rodríguez y Jesús Niño, los docentes sienten que su autoridad es "cuestionada"por los padres, directores e inspectores educativos. "Muchos piensan dejar la docencia", advierten.

Estos expertos alertan de que existe "un antes y un después"con las redes sociales. "No es lo mismo ser profesor en el siglo XX que en el siglo XXI", ha afirmado Crisálida Rodríguez, que ha alertado de que cada vez se dan más casos de ciberacoso, no sólo entre alumnos, sino de padres a profesores y, más concretamente, a través de grupos de Whatsapp.

"Las TIC son muy positivas, pero si son utilizadas como arma arrojadiza pueden hacer mucho daño", ha indicado esta experta, que asegura que en grupos de Whatsapp de padres se "difama"al profesor, se pone en cuestión su autoridad y no se le da la oportunidad de explicarse ni defenderse. Asimismo, ha alertado de que se dan cada vez más casos de grabaciones manipuladas a profesores que se muestran a los directores "sin contrastarlas"con el afectado.