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Manos Unidas redobla esfuerzos contra la pobreza

Presenta su campaña anual número 56 para concienciar a la población española de la necesidad e la ayuda al desarrollo

Foto: Manos Unidas
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Manos Unidas presentó este miércoles su campaña anual número 56 con el lema “Luchamos contra la pobreza ¿te apuntas?” a través de la que pretende hacer un repaso a los Objetivos de Desarrollo del Milenio, cuyo plazo de cumplimiento ha finalizado ya, una petición de ayuda a toda la sociedad española para que no olvide, entre otros, a los huérfanos del ébola, a los niños explotados, a las mujeres víctimas de la trata y todos aquellos que viven en zonas de conflicto. Así lo expresó la presidente de la organización católica: “Pedimos un esfuerzo adicional, un compromiso que realmente funcione y permita dotar de oportunidades a millones de personas invisibles, privadas de sus derechos y excluidas en una toma de decisiones que benefician siempre al poderoso frente al que menos tiene”.

Manos Unidas acompaña todas sus acciones con el testimonio directo de los misioneros con los que colaboran, que traen testimonios de dolor pero sobre todo de esperanza. En esta ocasión, están participando en la campaña un total de 26 misioneros de 17 países, que recorrerán España. En Madrid, estuvieron ayer la misionera adoratiz Caridad Paramundayil y el salesiano Jorge Crisafulli. Sister Caridad, como se la conoce, trabaja en el norte de India, su país natal, rescatando mujeres de la prostitución, a las que rehabilita y ofrece un futuro. Por su parte, Crisafulli, argentino, trabaja en África Occidental (Nigeria, Liberia, Sierra Leona, Ghana), donde el ébola y los grupos terroristas como Boko Haram siguen golpeando a la población. Su apuesta, que es la de los salesianos, pasa por la educación, la promoción humana y la evangelización sobre todo de los jóvenes y de los más pobres. “Estamos convencidos de que la educación transforma las culturas y las sociedades. Un pueblo educado difícilmente puede ser manipulado y oprimido”, dijo.

Además, alzó la voz para denunciar que “África va en el monopatín de los Objetivos de Desarrollo del Mileno, a la retaguardia”, y añadió: “Se dijo Yo soy Charlie. Yo soy África, yo soy Asia, yo soy América Latina, yo soy ese niño esclavizado, yo soy esa niña prostituida...”.

Además de los testimonios, Manos Unidas aportó las cifras de 2014, durante el que aprobó 608 nuevos proyectos por un importe de 47 millones de euros. La recaudación del año descendió ligeramente aunque aumentaron los ingresos procedentes del sector público tras años de bajadas.

Los actos, que concluirán el domingo con la celebración en toda España de la Jornada Nacional de Manos Unidas, tendrá también el habitual Día del Ayuno Voluntario el 6 de febrero, un gesto especial en solidaridad con los más de 800 millones de personas que sufren hambre en el mundo y que se puede acompañar con un donativo.

“Pedimos que se actúe: que se levante la voz ante las injusticias y se reclamen los derechos de los oprimidos. Porque muchas de esas injusticias contra las que queremos rebelarnos, tienen su origen en las miserias del norte. Nuestros comportamientos miserables, son el origen de muchas de esas pobrezas”, concluyó Soledad Suárez.