¿Mejorará la formación?

¿Son positivos los cambios propuestos por la Confederación Nacional de Autoescuelas de España (CNAE)?

–Todos aquellos cambios que contribuyan a formar de manera eficaz a los alumnos son buenos. Estas nuevas medidas pretenden mejorar la seguridad y reducir el índice de siniestralidad. Es muy importante formar bien a los alumnos desde el propio teórico para ello. Además, el hecho de que practiquen una conducción autónoma en su examen práctico es beneficioso porque aprenderán a valorar la situación, qué camino es mejor, etc. Y esto es a lo que se van a enfrentar a posteriori cuando tengan su propio vehículo.

¿Forzarán estas medidas a cambiar el modo de dar clase?

–Sí, hay que cambiar tanto en la teoría como en la práctica, eso está claro. Ahora mismo hay alrededor de 800 preguntas y los alumnos muchas veces saben las respuestas por pura repetición, no por conocer la reglamentación, pero ahora que van a haber más de 15.000 preguntas van a tener que estudiarse el libro, donde aparece todo el reglamento.

¿Está afectando la coyuntura económica al número de alumnos que se matriculan en las autoescuelas?

–Sí, esto es una realidad objetiva, nos está afectando a todas las autoescuelas muchísimo, porque los padres que les pagan el carné a sus hijos ahora mismo no pueden hacerlo. Además, los propios jóvenes no tienen trabajo para hacer frente a este gasto. Sacarse el carné hoy en día supone un gasto importante, y no todo el mundo tiene los recursos económicos suficientes para hacerlo. De hecho, en las clases teóricas hay mucha gente, pero aunque estén preparados no se quieren presentar para que no les corra convocatoria, porque luego no van a poder pagar las clases prácticas.