Eutanasia

Muere por eutanasia una joven de 17 años en Holanda

La joven confesó que iba a estar muerta en “menos de diez días” ya que no podía aguantar más el sufrimiento psíquico provocado por las violaciones que sufrió con 11, 12 y 14 años

Noa Pothoven posando junto a su libro
Noa Pothoven posando junto a su librolarazon

La joven confesó que iba a estar muerta en “menos de diez días” ya que no podía aguantar más el sufrimiento psíquico provocado por las violaciones que sufrió con 11, 12 y 14 años

Noa Pothoven, una joven holandesa de 17 años ha muerto en su casa gracias a la ayuda de una“clínica para morir”. Esta decisión fue tomada por la propia joven, que sufría depresión y anorexia, como consecuencia de los abusos sexuales que sufrió con 11, 12 y 14 años.

La eutanasia en Holanda es legal desde 2002, a partir de los 12 años, con permiso de los padres, los pacientes con enfermedades incurables pueden solicitarla. Sin embargo, a partir de los 16 no es necesaria esta autorización, por lo que Noa tomó la decisión ella misma. Estos episodios provocaron la depresión y anorexia, por lo que estuvo saliendo y entrando de hospitales para intentar curarse. Su historia salió a la luz en 2018 cuando publicó su autobiografía, ‘Winnen or Leren’ (Ganar o aprender), que a pesar de la dureza, el pasado marzo ganó un premio.

Según relató, había "dejado de comer y beber durante un tiempo"y subrayó que estaba "todavía respirando pero sin estar viva", lo que la llevó "después de muchas conversaciones y revisiones", a ponerse en contacto con la clínica Levenseinde, ‘clínica para morir’ sin que sus padres supieran nada, con el fin de solicitar eutanasia.

"No me voy a andar con rodeos: voy a estar muerta como mucho en diez días. Tras años de lucha, mi lucha ha terminado. Por fin voy a ser liberada de mi sufrimiento porque es insoportable. No me intentéis convencer de que esto no es bueno. Es una decisión bien considerada y definitiva", escribió en su mensaje de despedida en su cuenta de Instagram.

"Piensan que soy muy joven. Creen que debo terminar el tratamiento psicológico y esperar a que mi cerebro esté completamente desarrollado. Eso no pasará hasta que tenga 21 años. Estoy destrozada porque no puedo esperar tanto. Revivo el miedo y el dolor a diario. Siento que mi cuerpo está aún sucio", escribió en su biografía.