Salud

Sobrepeso: la técnica para quemar calorías sin moverte que equivale a una caminata moderada

Investigadores de la Universidad de Granada demuestran que la electroestimulación es una alternativa eficaz para elevar el número de calorías que se consumen tanto en reposo como durante el ejercicio. Esta herramienta resulta especialmente eficaz para personas con obesidad o movilidad reducida.

hombre con sobrepeso
Hombre con sobrepesoSinc

La falta de ejercicio influye de forma notable en que el 53% de la población española tenga sobrepeso y obesidad. El 42,6% de la población es totalmente sedentaria y no dedica ni una hora a la semana a la actividad física, según datos de la Sociedad Española de Obesidad (Seedo). Vivir con obesidad aumenta el riesgo de padecer una serie de enfermedades graves como diabetes, enfermedades cardiovasculares o ciertos tipos de cáncer, entre otras, además de que disminuye la calidad de vida y aumenta el riesgo de mortalidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) tiene muy claro que e importante realizar ejercicio de forma recurrente para mantener un buen estado de salud. Tanto es así que recomienda realizar entre 150-300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada y vigorosa y al menos dos sesiones de ejercicio de resistencia a la semana.

Sin embargo, la falta de tiempo es uno de los principales problemas que impide a la sociedad hacer ejercicio. Es por este motivo que investigadores de la Universidad de Granada (UGR) han probado la electroestimulación para ayudar en la quema de calorías. Esta tecnología funciona gracias a un traje y una aplicación móvil que producen una contracción involuntaria en distintas partes del cuerpo: pecho, espalda, abdomen, brazos, etc. Según el equipo de científicos del Instituto Mixto Universitario Deporte y Salud (iMUDS) la electroestimulación del cuerpo aumenta la intensidad del entrenamiento y reduce el tiempo necesario para obtener beneficios similares o incluso mejores que los del ejercicio convencional. Además, resulta especialmente eficaz para personas con obesidad o movilidad reducida.

PARA SABER MÁS

Los autores del estudio explican se trata de una herramienta que fue demonizada a principios de 2010 por la mala praxis llevada a cabo, pero que puede ayudar a reducir los tiempos de entrenamiento y a motivar a la población a hacer ejercicio. “El riesgo que conlleva este tipo de entrenamiento es que, al fin y al cabo, es una tecnología que se basa en la transmisión de corriente eléctrica al organismo y que, mal utilizada, puede ser peligrosa. Sin embargo, siempre y cuando sea utilizada por personal cualificado no debe haber problema alguno”, explica en una nota de prensa el investigador del Instituto Mixto Universitario Deporte y Salud de la UGR (iMUDS) Unai Pérez de Arrilucea, autor del estudio. De hecho, los científicos de iMUDS han visto que ofrece muchas ventajas. Tas la investigación llevada a cabo han comprobado que es una alternativa eficaz para elevar el número de calorías que se consumen tanto en reposo como durante el ejercicio. “Esto puede ser de gran interés para personas con extrema obesidad, que suelen reportar problemas y dolores durante el ejercicio, o para personas con movilidad reducida”, indica Unai Pérez de Arrilucea. "Mantener la musculatura activa y unos niveles medios de actividad física es necesario para conservar una buena salud".

Cómo se hizo el estudio

En la investigación participaron un total de 10 hombres sanos y físicamente activos. El objetivo era comprobar si las distintas formas de aplicación de la corriente eléctrica ofrecen diferentes resultados. Los científicos analizaron si aplicando un tipo de electroestimulación se obtiene más o menos beneficios que aplicando otro tipo de electroestimulación. “Es como si comparamos levantar 10 kg 20 veces con hacerlo con 20 kg 10 veces”, ejemplifica el investigador. Los voluntarios acudieron en dos ocasiones al laboratorio del iMUDS , en las cuales se hizo una comparativa con los distintos tipos de electroestimulación tanto en reposo (tumbados) como caminando. Además, estuvieron conectados con una mascarilla a un analizador de gases que mide el oxígeno que se consume y el dióxido de carbono que se produce. A través de unas fórmulas matemáticas, los científicos consiguieron obtener el número de calorías que se queman con ese determinado ejercicio.

“El resultado sorprendente es que, estando tumbados y con la electroestimulación colocada, las personas han quemado 604% más de calorías que estando tumbados sin nada. Y, además, el aumento que han tenido en el número de calorías equivale a estar caminando a una intensidad moderada”, detalla el investigador. Es decir, el estudio evidencia que, en una situación aguda, estar tumbado con la electroestimulación colocada equivale a estar caminando. Los científicos también confirmaron que cuando se está caminando la aplicación de electroestimulación puede elevar el consumo de calorías un 44%. "Sin embargo, cabe destacar que la electroestimulación experimentada era de alta intensidad y que las personas alcanzaron valores muy elevados de frecuencia cardiaca", concluye Unai Pérez de Arrilucea.