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Tercera edad

Varios jubilados se emocionan al reflexionar sobre si han vivido una vida feliz: “Me pusieron a trabajar con nueve años...”

Algunos de los entrevistados rompieron a llorar en plena calle al ser preguntados: "No puedo soportarlo, lo siento"

Un jubilado emocionado Pexels

Mirar atrás no es sencillo. Todo el mundo tiene algún arrepentimiento, ya sea mayor o menor, y ha pasado por épocas fabulosas y otras más complicados. La experiencia es mayor según aumenta la edad puesto que se han vivido más cosas. Mirar al pasado es algo que no se hace habitualmente al ser absorbidos por la más pura rutina, pero que cuando llega el momento lleva a las personas a recordar viejos momentos, sentir nostalgia e incluso emocionarse.

Esto se ha dado en un vídeo de Royki, un creador de contenido con más de 695.000 suscriptores en YouTube. El joven salió a la calle y entrevistó a varios jubilados mayores de 80 años para preguntarles por sus mayores errores y los consejos que darían a los jóvenes. Comienza preguntándoles por su edad y por su día a día, del que alguno que otro resalta la importancia de hacer deporte y salir a pasear, pero todo se vuelve más profundo cuando miran atrás hacia su infancia y juventud.

Este es el mayor arrepentimiento de los jubilados

"Me hubiera gustado viajar más", afirma un hombre casado pese a que considera que lo ha hecho bastante. Una mujer reflexiona sobre algo alejado del ocio: "Me arrepiento de haber estado en el campo y no haberme venido antes a la ciudad, me podía haber preparado mejor de lo que estoy preparado". El tema de la formación y los estudios es uno de sus mayores lamentos: "Me hubiera gustado hacer Derecho, pero mis padres no tenían medios económicos y tuve que conformarme con Magisterio", afirma otro hombre durante el vídeo".

Mirar atrás no es sencillo para ellos debido a todos los sacrificios de su infancia: "A mí me pusieron a trabajar con 9 años en una fábrica", señalaba una mujer. Otra de las entrevistadas tiene una historia vital todavía más complicada: "Mi padre murió en un accidente cuando yo tenía 17 meses, y mi madre quedó paralizada a los 61. Tuve que dejar el trabajo tras 27 años para cuidarla. No me casé por no dejarla sola", lamenta.

La emoción de uno de los entrevistadosYouTube

"Me hubiera gustado ser de esos que van a descubrir museos y se encuentran cosas antiguas", subraya otro hombre. Él vivió una vida muy alejada de ello: "He tenido que trabajar en una oficina toda mi vida y vendiendo género y ropa", añade.

¿Han sido felices?

El momento más estremecedor de la entrevista se vive con la pregunta de si han sido felices. La mayoría contestan de forma negativa mientras incluso sueltan alguna que otra lágrima. Algunos de ellos como un hombre se derrumban por completo: "No puedo soportarlo, lo siento". El motivo lo cuenta entre lágrimas: "Me quedé viudo hace tres años y cuando hablo de esto pienso en lo que he luchado y cómo me encuentro ahora, que tengo que luchar y vivir solo".

Vivir día a día

Este grupo de personas mayores lanza un emocionante mensaje para todos aquellos que todavía son jóvenes: "Disfrutad de la vida en lo sano, en lo pequeño, en lo cotidiano. Porque la vida pasa volando". Resaltan la importancia de aquello que a veces no parece tan importante: "Si solo valoras lo grande, lo pequeño se te va". En las pequeñas cosas está la verdadera felicidad y un cúmulo de ellas pueden marcar la diferencia para una verdadera felicidad.