Un individuo protagoniza las fiestas de la Vall: parado en medio de un encierro y dentro de un castillo de fuegos

Triple incidente bajo la mirada de numerosos espectadores, tres situaciones críticas que demandaron la acción policial. Si bien parecían eventos aislados, en la región de Vall existía un hilo conductor evidente: una única persona.

Durante un espectáculo de fuegos artificiales que marcaba el fin de la semana de festividades, asombrosamente, un individuo se adentró entre los artefactos pirotécnicos. El operario de los fuegos, fue el primero en reaccionar. Aunque las intenciones de este hombre eran desconocidas, la zona estaba llena de polvo explosivo en pleno estallido.

Al menos siete oficiales lograron inmovilizar al individuo y evacuarlo rápidamente. Pocos instantes después, el castillo de fuegos artificiales continuó su despliegue, dejando a los asistentes aún temblando por el susto.

Quieto en un encierro

Durante el encierro del sábado 5 de agosto, en el que se lidiaban toros de la ganadería de Fernando Mansilla, el hombre se presentó frente a los animales justo en el momento en que estos entraban a la plaza. Su comportamiento era pasivo, dándoles la espalda, andando tranquilo y como si nada. Uno de los toros, al intentar esquivarlo, resbaló y le embistió por detrás, haciendo que perdiera el equilibrio. El resto de la manada pasó rozándolo, evitando una embestida más grave. Ya en ese momento, la Policía Local había indicado que lo habían retirado del lugar en múltiples ocasiones. En el minuto 3:13 en el vídeo se observa el momento.

Ese mismo día, por la tarde, se recibió una alerta de que un individuo había irrumpido en la plaza donde se desarrollaba un concurso ganadero, amenazando al guardia de seguridad con una navaja. Los oficiales ingresaron a la plaza, lo sacaron y lo detuvieron por cargos de amenaza.

Afortunadamente, en ninguno de estos casos hubo heridos. La situación actual del individuo, quien fue detenido al menos tres veces durante el mismo fin de semana, es desconocida.