Entrevista

Samantha Hudson: «En el especial se podrá ver a Marta Sánchez tirándome por unas escaleras»

La artista presenta este año «Una Navidad con Samantha Hudson», un programa navideño que estrena hoy Atresplayer Premium

Samantha Hudson
Samantha HudsonUnai Mateo

Samantha Hudson acaba de presentar su primer disco, «Liquidación total», tiene su propio programa y ha estado en las cocinas de «MasterChef». Literalmente, y ella lo sabe, desde que dejó de ser Iván González le van a dar las uvas trabajando. Atresplayer Premium estrena hoy «Una Navidad con Samantha Hudson», una producción en colaboración con Suma Content y Los javiscomo productores. Alejandro Marín dirige este especial y Jesús Díaz Morcillo está al frente del guión, y como invitados, Amaia Romero, Anabel Alonso, Manuela Trasobares, Arturo Valls, Victoria Martín, Supremme de Luxe, o La Prohibida, vivirán la noche con la artista que recibirá la visita de varios fantasmas para recordar sus orígenes.

¿Le gusta la Navidad?

No sé si me gusta o finjo que me gusta. También voy variando un poco. A veces digo que soy expresiva y otras veces digo que no lo soy. Digo que soy vegana y luego me como un cacho de pollo frito. La Navidad es según me dé. Tal vez ahora que he sacado un especial navideño, lo apropiado sería decir que sí me gusta. Por lo menos, me gustan los villancicos, pero para mi eso es ajeno a estas fechas. El burrito sabanero me lo meto por el culo aunque sea verano.

O sea, que tiene que ver con cómo se encuentre de ánimo...

Claro, como todo en esta vida, dependemos del contexto al 90 por ciento. Ya puedes ser muy festiva, pero si estás hecha una porquería el 24 de diciembre a ver quién te canta a ti «Blanca Navidad».

¿Qué hace en estas fechas?

Me voy a casa a pasar la Navidad con mi familia, porque como vivo fuera, no les veo mucho. Porque también me gusta performar que soy una mujer muy familiar: de ponerme la mantilla e ir a los entierros, hacer la confirmación, la unción de los enfermos... Ese universo castizo me fascina y como nací en Castilla y León me viene como anillo al dedo. Entonces un año tras otro, allí a la capital, al lado del Bierzo, a comer altramuces y a cantar «hacia Belén, va una burra, rin, rin...».

En la descripción del especial de Navidad que este año protagoniza hablan de «una de las personalidades más interesantes dentro y fuera de las siglas LGTBI». ¿Dentro y fuera?

Si yo me considero dentro y fuera, para que engañarnos. Además, es un error pensar que los asuntos LGBT, igual que los asuntos feministas y de las mujeres, o los asuntos de las personas racializadas, solo le atañen a esos grupos o a esas minorías tan vulnerables. Eso es mentira. Somos una sociedad y como seres sociales interactuamos entre nosotras. Entonces, al final, si dejas a las personas recluidas en los márgenes y que se retroalimenten y solo hablen de los temas que son exclusivamente particulares de ellas, pues no consigues nada y estás generando una sociedad distante y fragmentada. Lo LGBT es patrimonio de todos. Lo de las mujeres es patrimonio de todos. Y lo de las personas racializadas es patrimonio de todos, en el sentido de que es la tarea de todas las personas que conforman la sociedad ocuparse de las problemáticas y, por supuesto, de buscarle una respuesta. Así que soy un icono LGBT, pues ya que digan los maricones ¿no? Me gustaría ser un icono y un referente para toda la otredad, que no somos nosotras, sino ellos, que habitan la norma y que están en esa parte tan consolidada y establecida llamada status quo.

¿Cómo explicaría lo que vamos a ver en el especial?

Podría decir 80 historias y estas cosas tan corporativas, pero nada funciona mejor que un buen clickbait. Así que diría que si quieren ver a Marta Sánchez empujando a Samantha Hudson por unas escaleras, vean el especial.

¿Se puede considerar un programa de variedades?

Creo que soy una chica muy variada: un mega mix de frutos secos. En el especial habrá anacardos, pasas, algún garbanzo sin hidratar, algún kiko, pero no demasiados, porque el maíz inflado es lo peor. Y quién sabe, puede que alguna almendra.

¿Considera que ha sido una niña buena? ¿Iván y Samantha han pedido cosas distintas?

Creo que Iván está enterrado. Le di una paliza de muerte y ahora yace en mi jardín a expectativas de que la familia lo encuentre y Samantha Hudson vaya a la cárcel por homicidio. No hay distinción entre Samantha e Iván. La gente no es la misma desde que nace hasta que se muere. Y esa transición nos ocurre a todas. Tal vez la única diferencia es que yo haya decidido rebautizarme. No por nada en concreto, sino porque creo que Samantha Hudson tiene mucho más glamour. Creo que Iván no era un nombre nada coherente para la chica que soy a día de hoy. ¿He sido una chica buena?, seguramente. Pero espero que eso no sea un impedimento para merecerme unos buenos azotes. He pedido lo mismo de siempre, que me dejen tranquila.