En la guerra

Desolador testimonio de la reportera Sol Macaluso: “Mi guía ucraniano me ha pedido que me lleve a su hija, es mi familia ahora”

La periodista contó cómo su cámara y guía han de quedarse en su país combatiendo y le han pedido que se haga cargo de su pequeña

Patricia Pardo y Sol Macaluso, durante su conversación en 'El programa de AR'
Patricia Pardo y Sol Macaluso, durante su conversación en 'El programa de AR'Mediaset

La dureza de la guerra en Ucrania está dejando testimonios desgarradores cada día. Uno de ellos ha sido el que ha protagonizado la periodista argentina Sol Macaluso, que está cubriendo la información para distintos medios de comunicación, entre ellos para Mediaset y ayer entró en “El programa de Ana Rosa” desde Belz, que es la ciudad fronteriza con Polonia. Hace un mes que se encuentra en tierras ucranianas conviviendo con un cámara y un guía, como otros periodistas que ejercen la profesión para informar en tiempos verdaderamente difíciles. Y es allí donde le ha pillado la invasión de Rusia.

La dureza no radica solo en las dificultades para hacer las conexiones, para mandar a tiempo la información y ni tan siquiera por el temor o la incertidumbre a la que se tienen que enfrentar. Una de las partes más complicadas es convivir con la tremenda radicalidad de la guerra en primera persona, con la destrucción de las familias, con el abandono del hogar, con el destrozo de la hasta ayer infancia...

Y así lo contaba la propia periodista en el “Programa de Ana Rosa”. “La familia de mi camarógrafo y mi guía cruzan [la frontera], y ellos se quedan aquí en el país”, ha dicho la reportera, que a partir de ahora se hará cargo de la familia de su guía: “Nos ha pedido muy emotivamente que nos llevemos a su hija, por favor”.

“Es mi familia ahora”

Muy emocionada, relataba la situación de cómo estaba viviendo todo: “A esta gente la conozco desde hace más de un mes. Hemos compartido todo el día información y es muy duro que se tengan que quedar a defender a su país, dejar a su familia y que vengan y te digan “por favor, llévate a mi hija. Hazte cargo de ella y que no le falte nada”. ¿Qué le vas a decir? No hay palabras”, contaba la argentina. Preguntaban desde plató, “¿y qué le has dicho?” “Es mi familia ahora. [Su hija] Es mi hermana”.

La acreditación de prensa de la periodista le puede facilitar la salida del país, aunque la situación es tan compleja y va cambiando tanto que como aseguró en el programa van “minuto a minuto” despejando las incógnitas y sin todavía hoja de ruta definida.

De hecho, no tiene claro ni cómo podrá cruzar la frontera ni cuando podrá reencontrarse con la familia de la niña. “Es la parte más dura. Uno se compromete, pero no sabe hasta cuándo”, ha dicho entre lágrimas. De lo que no tiene dudas es que ahora mismo ella, la hija de su guía y el resto de su equipo son “una familia numerosa y grandiosa de personas increíbles”, y hará por ellos “lo que haga falta”, tal y como zanjó la propia periodista su intervención.