J.L. Lozano: «No creo en el indulto»

Ganadería de Bilbao por méritos propios. Con tres trofeos a mejor ganadería y toros de triunfo, se ha ganado el respeto de todos.

Ganadería de Bilbao por méritos propios. Con tres trofeos a mejor ganadería y toros de triunfo, se ha ganado el respeto de todos.

-¿La corrida reseñada este año para Bilbao puede igualar los éxitos de la pasada edición?

-Espero una corrida que se ajuste a las exigencias de la plaza de Bilbao, que tenga buen trapío, de buenas hechuras y muchas embestidas.

-¿Le preocupa no satisfacer a las plazas y aficionados más exigentes?

Para que un toro dé juego en una plaza de primera, tiene que ser un animal encastado y bravo, porque si no se parará y será un toro bobalicón, que es lo que queremos evitar.

-¿Qué evolución ha sufrido su ganadería en sus más de tres décadas?

Todas las ganaderías en España han evolucionado, unas más y otras menos, pero todas hacia un toro más grande.

-¿Cómo definiría su ganadería?

-Son conocidos por ir de menos a más, pero también humillan mucho y tienen largo recorrido.

-¿De la corrida que lleva este año a Bilbao, tiene algún «Favorito»?

-Es muy dificil predecir que un toro vaya a ser de triunfo, aunque es cierto que toros como «Malagueño», en el campo ya presentaban unas condiciones excelentes. Pero lo que importa es la regularidad, no los toros excepcionales.

-¿Qué opina sobre el incremento en el peso del toro en plazas como Bilbao?

-En las plazas de primera llevar un toro grande se ha convertido en requisito indispensable, pero es una barbaridad. El toro de casta debe ser fino y atlético porque lo que le vamos a exigirle es un ejercicio extremo. Pero los ganaderos no tenemos la culpa, nos han obligado a esta situación, si no se presenta un toro grande, casi irreglamentario, te echan la corrida para atrás y todo esto bajo el consentimiento del aficionado mayoritario.

-¿Qué prefiere el ganadero, un toro de indulto o uno de vuelta al ruedo?

-Un toro bravo con una muerte digna y premiado con una vuelta. De lo sublime a lo ridículo hay un paso, yo me he llegado a oponer al indulto de un toro mío. No creo en el indulto, la lidia tiene que ser completa. Se puede aceptar como algo excepcional, pero se abusa mucho, tengo más de 14 indultados.

-¿Cree que los percances pueden incrementar el prestigio de una ganadería?

-Todo lo que suponen las cogidas es negativo, los toros son criados para que embistan, no para que cojan, se tiende a criar un toro que sea bravo pero que obedezca. El problema es que la cogida ha pasado a ser una noticia más importante que el triunfo.

-¿Está de acuerdo con la frase popular de que el toro malo descubre al torero bueno y viceversa?

-El toro bueno necesita un torero bueno, si está el toro por encima del torero será un fracaso del diestro. Pero también el toro que tiene dificultades, si es dominado por el torero puede aportar mucha categoría a la faena. Como diría Carlos Núñez: «nuestra ganadería es muy buena, pero para los grandes toreros»

-¿Qué torero cree que ha sabido entender mejor sus toros?

-Ha habido muchos, solo hace falta ver la llamativa cantidad de toreros como César Rincón, El Juli, El Cid, José Tomás o David Mora, que han triunfado en Madrid con esta ganadería.