Ecologismo

Las cañas invasoras de los ríos diezman a los artrópodos

Hacen que los insectos, arácnidos y crustáceos que viven en su suelo sean menos y más pequeños

La caña (Arundo donax) es una planta invasora capaz de crecer y reproducirse en un amplia franja de condiciones ambientales
La caña (Arundo donax) es una planta invasora capaz de crecer y reproducirse en un amplia franja de condiciones ambientaleslarazon

Una investigación llevada a cabo por biólogos de la Universidad de Barcelona ha revelado que las cañas, una plata exótica invasora de los cauces de los ríos, hace que los artrópodos (insectos, arácnidos y crustáceos) que viven en su suelo sean más pequeños, más escasos y menos diversos.

La investigación, publicada en la revista «Biological Invasions», es el primer estudio que relaciona la invasión de la caña con cambios en la composición y la medida de los artrópodos del suelo.

La caña, una planta muy abundante en la orilla de muchos ríos de la España, altera las comunidades de artrópodos del suelo y reduce el tamaño corporal de estos invertebrados en los hábitats naturales que coloniza, según ha explicado Alberto Maceda Veiga, experto de la Estación Biológica de Doñana (EBD-CSIC) y del Instituto de Investigación de la Biodirversidad de la UB (IRBio).

La caña (Arundo donax), una gramínea originaria de Asia y algunos países del área mediterránea, es una planta invasora capaz de crecer y reproducirse en un amplia franja de condiciones ambientales, pero principalmente en zonas húmedas.

Esta especie exótica, una de las mayores gramíneas del mundo, es muy utilizada en el ámbito mediterráneo para estabilizar taludes, hacer cerrados de huertos y como soporte de plantas cultivadas.

La investigación ha descubierto la relación de la invasión de cañas con el tamaño corporal de los artrópodos del suelo.

En el estudio, los autores han comparado las comunidades de artrópodos de tres tipos de vegetación de ribera -incluidas zonas invadidas por la caña- en las cuencas fluviales de los ríos Ripoll y Llobregat y en el parque natural de Collserola (en concreto, en el arroyo de Vallvidrera).

Maceda ha señalado que «algunos estudios previos sobre A. donax mostraban menos abundancia y diversidad de los artrópodos en ecosistemas de ribera en EEUU, pero sin un impacto claro sobre los artrópodos de suelo».

Según Maceda, que los artrópodos de las cañas sean más pequeños y menos diversos puede ser por «múltiples causas directas e indirectas, como la presencia de compuestos que hacen de la caña un alimento poco nutritivo y de baja palatabilidad, así como las alteraciones de las propiedades físicas y químicas del suelo, que afectan negativamente tanto a la fauna como a la flora nativa».

Esta gramínea exótica e invasora crece muy rápidamente en los hábitats naturales y perturba profundamente la biodiversidad de los ecosistemas fluviales.

Sin embargo, el estudio de la UB también detecta que los colémbolos -unos artrópodos diminutos cercanos a los insectos- son más abundantes en los cañaverales.

«La hipótesis con la que trabajamos -según Maceda- es que la caña produce gran cantidad de hojarasca, tallos y otros restos vegetales que se acumulan y evitan crecer a otros vegetales. Estos restos, que se descomponen por la acción de hongos y otros microorganismos, son la principal fuente de alimento de los colémbolos».

Maceda ha recordado que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) considera la caña una de las peores cien especies invasoras del mundo.

Los artrópodos de las riberas fluviales no son los únicos organismos afectados por el impacto ecológico de esta planta.

Otros grupos faunísticos -aves, micromamíferos, anfibios y reptiles que se alimentan de artrópodos- también están afectados.

«Todo dependerá de las posibilidades que tengan estos animales para explotar hábitats no invadidos por la caña. Es muy probable que la invasión por la caña también altere el aporte de materia orgánica a los ecosistemas acuáticos; lo que causaría unos efectos difíciles de predecir ahora sobre su fauna, incluidos los peces», ha advertido Maceda.

EFE