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Escándalo sexual en una prisión: los funcionarios organizaban orgías en un jacuzzi

Una de las funcionarias considerada la cabecilla de los encuentros sexuales y descrita como "ninfómana" pasó en tan solo un año de visitante a guardia

Un funcionario de la cárcel de Badajoz es agredido por un interno que fue reducido con ayuda de otros presos
La cárcel de BadajozEuropa Press

Un complejo penitenciario se ha visto envuelto en una importante investigación interna debido a un escándalo sexual que involucra a más de 10 funcionarios. A los afectados se les acusa de presuntamente organizar y participar en encuentros íntimos, en ocasiones durante sus turnos laborales dentro de la cárcel.

Las acusaciones recaen sobre funcionarios que, según informes de fuentes como Sudinfo, Daily Mail y Fox News, celebraban estos encuentros, descritos como orgías, al termino de la jornada laboral y a menudo congregándose en un jacuzzi que pertenecía a un guardia identificado con la letra 'P'. Se cree que los participantes escogían a sus parejas para el encuentro de cada día a través de un método aleatorio, seleccionando a quién se acercarían a través de un sistema de pulseras de colores.

Una de las funcionarias de la prisión está considerada la cabecilla y ha sido descrita como alguien de comportamiento ninfómano que supuestamente exigía a sus compañeros mantener encuentros íntimos como parte de sus funciones diarias.

"A partir de las 06:00 horas de la mañana, hacía saber que si no tenía relaciones sexuales no podría trabajar", declaró una fuente anónima. Además, se sugiere que un alto cargo de la prisión permitió a esta mujer utilizar su espacio de trabajo para encuentros sexuales con sus compañeros durante sus turnos.

La entrada de esta funcionaria en la prisión ya presentó interrogantes sobre cómo fue su contratación. Es la hermana de un recluso condenado por asesinato de un hombre gay, su presencia diaria como visitante y su trato cercano con las familias de los internos levantaron sospechas. Su rápida transición de visitante a personal de la prisión, que culminó en tal solo un año, sorprendió a muchos trabajadores del lugar y, posteriormente, su hermano fue trasladado a otra prisión muy cercana, a 30 minutos de distancia en automóvil.

En varios informes recogidos por los medios mencionados señalan que al guardia propietario del jacuzzi se le fue prohibido acceder al sector de mujeres tras haber mantenido supuestamente relaciones con reclusas. Se desconoce si otros miembros del personal estuvieron involucrados en relaciones con los internos. La funcionaria en cuestión fue, tras estos sucesos, reubicada en el área de mujeres como intento de "controlar sus impulsos sexuales".

Una investigación oficial, aún en curso según el Departamento de Justicia del Servicio Público Federal, involucra a entre los 10 y 12 empleados señalados, con posibles medidas disciplinarias pendientes. La Prisión de Lantin, la cárcel más grande de Bélgica ubicada cerca de la ciudad de Lieja, de seguridad mínima que alberga tanto a hombres como mujeres, ha saltado al foco de la polémica debido a este inusual incidente. El establecimiento, considerado el más grande del país, se diseñó basándose en modelos estadounidenses y alemanes, según detalla su propia página web.