Marín se compromete a «intentar recuperar el dinero defraudado»

El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, sostuvo ayer que la sentencia del caso ERE demuestra que «Ciudadanos fue el freno a la corrupción del PSOE» y recordó que, cuando pidió que los ex presidentes entregasen sus actas de senador y diputado, «tuvimos que escuchar muchísimas cuestiones que no voy a repetir, pero me acuerdo cuando me llamaban chantajista, aunque hoy –por ayer–, la justicia ha puesto las cosas en su sitio». Marín aseguró que «es un día triste», porque «eran fondos públicos destinados a los parados», y dijo que el actual Gobierno andaluz intentará recuperar el dinero defraudado para destinarlo a políticas de empleo.

Sobre el papel de su partido en este caso, declaró que «introdujimos la cláusula que dice que cualquier imputado por corrupción política tenía que abandonar su escaño, y desde entonces hasta ahora no ha habido ningún caso», y se mostró muy duro con el papel de la ex presidenta andaluza, Susana Díaz, en este asunto. Así, dijo que «fue la señora Díaz la que pidió el archivo de la causa cuando era presidenta de esta comunidad y también la que, como presidenta, retiró a la Junta de la acusación, y la que puso la mano en el fuego por el señor Chaves y el señor Griñán y todos sus compañeros que han sido condenado por la justicia».

Marín señaló a Díaz como una la responsable de la retirada de la causa del Gobierno andaluz y la petición de archivo, «y si esto no tiene ninguna consecuencia, tiene que llevar a una reflexión muy clara a las bases del Partido Socialista en Andalucía». Junto a ello, aseguró que «es una sentencia que nos tememos que es el principio de muchas que vamos a ir conociendo, porque tenemos vivas muchas piezas y están vivos asuntos que también nos avergüenzan a los andaluces, como son los cursos de formación y la Faffe», subrayando que «es un día triste para la democracia de este país, porque es el caso más importante de corrupción de España y me atrevo a decir que de la historia de Europa».