Unas 500 personas participan en una cadena humana por la desecación de las Salinas de Cabo de Gata

Unas 500 personas han participado este sábado en una cadena humana para llevar agua de mar desde el Torreón de San Miguel hasta el humedal protegido de Las Salinas de Cabo de Gata como acto de protesta por la desecación de estas charcas como consecuencia de una avería hace dos meses en el canal de alimentación. La protesta, que ha sido convocada por la asociación cultural ‘Cabo de Gata me mata’, se ha realizado también a en La Almadraba.

La protesta se ha realizado como respuesta a la “inacción” de la Junta de Andalucía y de la empresa Unión Salinera que explota los terrenos, ante la desecación de las charcas que “son hábitat de aves migratorias” que “siguen viniendo” pero “se encuentran que no hay charcos para repostar”, según han indicado fuentes de la asociación a Europa Press.

Este domingo ‘Cabo de Gata me mata’ tiene previsto hacer un llamamiento para que todos los bañistas que estén entre Cabo de Gata y las salinas “salgan a las 13,00 horas a la carretera para reivindicar con una cadena humana que se ponga un sistema, al menos provisional, desde el mar a las salinas”, ya que “es un lugar de gran importancia medioambiental y turística”.

El colectivo indica que, pese la advertencia de última hora dada desde la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible a la empresa salinera para que, en “tres días”, dé una solución urgente al cegamiento del canal que abastece al humedal, “no se creen nada” y reclaman a los vecinos que “no se queden quietos” ante lo que califican de “desastre ambiental”.

Recuerda, asimismo, que el colectivo ecologista ‘Amigos del Parque’ ha puesto en conocimiento de la Fiscalía la situación de Las Salinas de Cabo de Gata, enclavadas en zona A1 de protección en el Plan de Recursos Naturales de Cabo de Gata-Níjar e incluidas en la lista Ramsar de Humedales, así como Reserva de la Biosfera.

Por su parte, la delegada en funciones de la Junta en Almería, Aránzazu Martín, ha asegurado este viernes que el Gobierno andaluz ha actuado “con la máxima celeridad” ante el proceso de desecación del humedal protegido de Las Salinas de Cabo de Gata y ha remarcado que un “grupo de técnicos” de la Delegación Territorial “está en primera línea por si hubiera que llevar a cabo alguna actuación ‘in situ’”.

En declaraciones a los medios, Martín ha señalado que “desde el primer momento” en que la empresa Unión Salinera SL, del grupo Salins y encargada de la explotación comercial de los terrenos, informó “el 7 de junio” de que “existía un problema”, la Junta ha actuado.

El cegamiento casi total tiene su origen en las lluvias torrenciales registradas esta primavera en la zona, lo que generó deslizamientos y derrumbes parciales desde la montaña con arrastre de escombros.

La Junta Rectora del parque natural de Cabo de Gata-Níjar indicó que se está controlando y vigilando mediante la elaboración de «censos continuados» a la fauna que habita en las Salinas de Cabo de Gata para evitar «cualquier afección» por la desecación del humedal debido a la obstrucción del canal que lo alimenta y precisó que las aves migratorias «han buscado refugio» en otras zonas similares de la provincia como las Salinas de Cerrillos y Punta Entinas-Sabinar.

n un comunicado, la directora, Lucía Tejero, ha trasladado que los técnicos y los agentes de Medio Ambiente “se han mostrado vigilantes en todo momento” ante el “problema sobrevenido” en las salinas “artificiales”, según ha remarcado, y motivado por una “suspensión accidental” de la “actividad” de la empresa concesionaria, Unión Salinera SL.

“Estamos trabajando entre todos los técnicos de la Delegación y de la Agencia, fundamentalmente, en el control de los censos y afección a la recta final del periodo de nidificación, para evitar posibles afecciones sobre aquellas especies que permanecen en las lagunas aún con agua”, ha señalado.

Tejero ha añadido que se está buscando “la solución técnica de mayor eficacia y viabilidad para el mantenimiento de las condiciones del ecosistema”, ya que, según ha explicado, una vez restablecida “la entrada de agua marina y la actividad salinera, las aves volverán, lo que será prueba de que no se ha perdido el ecosistema”.

“Esto vendrá a aportar niveles óptimos de la lámina de agua en este humedal que, precisamente, surgió con la extracción de la sal y que, por tanto, requiere ese equilibrio sostenible”, ha apuntado para defender que la “necesidad de continuar con la actividad industrial”.

La directora de la Junta Rectora ha insistido en que “nada más comunicar la compañía el problema el pasado 7 de junio”, la administración emitió “los informes favorables necesarios y pertinentes, en 48 horas, para que se emprendieran las medidas de emergencia necesarias para restablecer la normalidad”.

“Estamos actuando con la máxima celeridad posible a nivel técnico, y a todos los niveles, teniendo en cuenta la dificultad que supone, al tratarse de una finca y actividad privadas”, ha asegurado.

Al hilo de esto, ha concretado que esta situación “nos obliga a requerir a la empresa análisis de la situación y la toma de medidas urgentes y actuaciones de emergencia necesarias para el restablecimiento normal de la llegada del agua marina en niveles óptimos”.

Tejero ha destacado que los trabajos “coordinados” por los expertos técnicos son “cruciales” para, en primer lugar, “mantener la diversidad existente en las salinas, así como para recuperar el ecosistema y sus aves migratorias”.

“Gracias a la riqueza medioambiental que tiene esta provincia en materia de humedales, han buscado refugio en otras zonas muy similares en la provincia, como las Salinas de Cerrillos y otros espacios de Punta Entinas-Sabinar”, ha reiterado.

Por último, ha llamado a “confiar” en los trabajos de los técnicos del conjunto de la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible y la Agenciad de Medio Ambiente, así como de los expertos “que buscan ya las alternativas para poner fin a este problema sobrevenido”.

La Junta de Andalucía informó el viernes de que dispone de una solución técnica para actuar de forma “inminente” en las Salinas de Cabo de Gata en el caso de que Unión Salinera “no dé respuesta” al escrito remitido, el pasado miércoles, por la Delegación Territorial de Desarrollo Sostenible estableciendo un plazo de tres días para presentar una actuación de urgencia que permita el suministro de agua de mar”.