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Mascotas

¿Cómo proteger las pezuñas de tu perro? Poca gente lo sabe, pero es crucial en verano

Con la llegada del buen tiempo, proteger las patas de nuestras mascotas es una tarea esencial para evitar quemaduras y otras lesiones

Un veterinario emite advertencia urgente a dueños de perros sobre un error común y obsoleto istock

Las almohadillas plantares de los perros, estructuras protectoras, son clave para su movimiento. Pero estas estructuras vitales son también sumamente vulnerables al tiempo y a sustancias del ambiente, lo que puede acarrear problemas de salud importantes sin el cuidado debido.

El calor estival es un gran enemigo. El asfalto o pavimento se calienta sustancialmente con el sol, provocando quemaduras graves. Las bajas temperaturas y el hielo invernal también causan daños considerables, como congelación o agrietamiento de la piel. Hay determinadas cosas que es importante tener en cuenta y mucho cuidado para que a tu mascota no le suceda nada.

Sustancias químicas, además de la temperatura, amenazan las patas. Productos de limpieza o anticongelantes no formulados para mascotas, pueden causar quemaduras por contacto. Identificar síntomas y actuar rápido es clave para el bienestar animal. Lo primero, es saber si hace demasiado calor para pasear.

El cuidado esencial de las almohadillas caninas

El comportamiento del perro es una señal notable de problemas en sus patas. Si un can se lame las almohadillas con frecuencia o cojea tras un paseo, indica molestia o lesión. Al examinar la pata, puede verse decoloración o tejido rosado expuesto bajo la capa externa, según Dailypaws.

Ante una quemadura visible o un lamido excesivo tras una caminata, actúe de inmediato. Remojar las patas en agua fresca puede aliviar el dolor inicial, similar a cuando nos quemamos un dedo. Las quemaduras leves suelen curarse en aproximadamente una semana con pocos cuidados adicionales, principalmente manteniendo la zona limpia con un paño húmedo.

Las quemaduras de mayor calado pueden tardar varias semanas en sanar y, en la mayoría de los casos, requieren atención veterinaria profesional. Busque ayuda si hay heridas profundas, signos de infección (secreción, hinchazón), dolor importante, o si el área no muestra signos de curación. En tales situaciones, pueden ser necesarios antibióticos, analgésicos o un tratamiento más específico para la herida.

Aunque es tentador tratar al perro en casa, la intervención profesional es a veces ineludible. Cremas o ungüentos tópicos suelen ser lamidos por el animal, anulando su efecto. El vendaje de la herida, aunque puede parecer una solución casera, a menudo indica la necesidad de medicación adicional y una evaluación veterinaria para desarrollar un plan de tratamiento adecuado.

La prevención es la mejor estrategia. Para evitar quemaduras por productos químicos, use solo productos seguros para mascotas y mantenga al perro alejado de zonas tratadas hasta que sequen. Para temperaturas extremas, es aconsejable pasear en horas frescas (mañana o anochecer) o por superficies blandas como césped, evitando aceras y asfalto. Calcetines o botines protectores ofrecen seguridad extra. Una regla práctica y sencilla es la "prueba de la mano": si el suelo está demasiado caliente o frío para que usted mantenga la mano cómodamente sobre él, es demasiado extremo para las patas de su perro.