En Zaragoza y otros municipios

Picaresca contra la DGT fallida: se ponen más multas de lo habitual gracias a los radares autosuficientes

El denominado como radar blindado, muy efectivo también contra el bandalismo

La DGT recaudó casi 130 millones con los radares en 2014
Radares durante el apagón del 29 de abril de 2025larazon

El apagón que ha afectado a Portugal, al sur de Francia y nuestro país no solo ha dejado incomunicados a hogares y establecimientos comerciales, sino también a prácticamente todo el sistema eléctrico de tráfico urbano. Así pues, muchos conductores dieron por hecho que, por una vez, los radares no podrían multarles. Sin embargo, no en todos los casos fue así: algunos de ellos no solo han seguido activos, sino que han multiplicado especialmente su actividad sancionadora.

Una desacertadísima conclusión a la que muchos conductores han llegado por, sencillamente, absoluta ignorancia. Y es que no todos los controvertidos dispositivos dependen de Red Eléctrica de España. Justamente, los más innovadores, instalados de manera progresiva por la Dirección General de Tráfico (DGT), son completamente autónomos.

Así son estos radares: con paneles solares

Aunque si el ‘cero absoluto’ se hubiera dado hace solo un año, no habría funcionado ni uno de ellos. Porque dichos radares autónomos son relativamente nuevos, especialmente diseñados para resistir cualquier tipo de desorden público o incidencia. Se les denomina técnicamente radar blindado porque son cajas fabricadas en acero reforzado con gruesos cristales de seguridad, haciéndolos completamente resistentes a posibles ataques vandálicos. Pero hay más.

Los radares blindados cuentan con equipos de climatización interior que les permiten continuar funcionando en condiciones extremas de mucho frío o calor. Además, lo más relevante en contextos de apagón total como el vivido este pasado lunes 28 de abril es su excelente autonomía: no necesitan estar conectados a red para operar. Gracias a la implementación en sus sistemas internos de paneles solares, consiguen la energía necesaria para mantenerse operativos las 24 horas del día, enviando automáticamente las infracciones registradas al centro de tratamiento de multas de la DGT en León.

Así pues, las consecuencias están claras para quienes han creído que durante todas las horas que ha durado el gran apagón las carreteras se han convertido en un lugar sin normas ni ley. Estos radares sí que les ‘han pillado’ y las sanciones les serán enviadas como si se hubiera tratado de cualquier otra jornada sin incidentes.

Momentos caóticos en Zaragoza y otros municipios

Entre los dispositivos que no pudieron resistirse al apagón, las cámaras instaladas en los semáforos que tienen la única función de multar a quienes se saltan el rojo o circulan sin cinturón. Y no son pocas en ciudades como, por ejemplo, Zaragoza o Huesca. Al dejar de recibir drásticamente suministro eléctrico, no pudieron grabar durante el 'cero absoluto', de la misma forma que los propios semáforos, generando así un caótico escenario de desorden en cruces críticos de la capital aragonesa y otros municipios de la comunidad aragonesa.

Que estos dispositivos acoplados a los semáforos dejasen de funcionar casi de forma instantánea ha sido un alivio para los muchos que decidieron pasar de las normas de circulación de la DGT por un día, aunque para otros lo sucedido por el apagón podría modelar un nuevo paradigma en el que las autoridades conviertan a todos los radares en dispositivos completamente autónomos. Por si vuelve a pasar, y para no dejar pasar ni una sola multa.