Lluvia de premios ricos en Madrid

La Real Casa de Correos fue durante la noche del lunes un sabroso escenario del buen comer. ¿El motivo? La Academia Madrileña de Gastronomía, presidida por Luis Suárez, en colaboración con la Comunidad de Madrid, hizo entrega de la primera edición de unos galardones que reconocen el fenomenal hacer de nuestros cocineros en un momento en que nuestra cocina se encuentra en plena ebullición y la culinaria española es líder mundial. Los cocineros del planeta observan el trabajo de los chefs españoles, siempre inquietos, innovadores y con hambre de comerse el mundo.

Se trata de unos premios con los que la institución busca valorizar y divulgar la labor de los profesionales y las empresas relacionadas con la gastronomía capitalina. Así, David Muñoz recogió el suyo por haber revolucionado el escenario gastro, mientras que el trabajo de Abel Valverde en Santceloni fue reconocido, porque, gracias a él, el servicio del dos estrellas Michelin es impecable. La propuesta más innovadora la ha creado Javi Estevez, nombrado chef revelación en Madrid Fusión, al poner en valor la casquería en la Tasquería. Punto MX es el primer restaurante mexicano en brillar con un astro de la biblia roja en España y en Europa, y que esté en Madrid es de agradecer. Así que, “por ser responsable de la apertura de culturas de las altas esferas culinarias”, Roberto Ruiz se llevó un plato premiado, lo mismo que Hugo Muñoz, Cocinero Revelación en esta edición “por la singular fusión entre el carácter mediterráneo y el arte culinario japo que practica en KaButoKaji”. Mario Vallés, “un maestro de la cocina afrancesada, que rejuvenece cada día y que aún tiene mucho que mostrar”, es el cocinero con más potencial. Los callos Gaona, “plato que lleva el nombre de mi padre al que le hubiese emocionado verlos reconocidos”, escribió Juanjo López-Bedmar en un twit, son para empezar a comer y no parar. Por eso, son, sin duda, el plato más castizo, mientras que el Premio a la Bebida ha recaído en Lavinia. Que él diálogo entre los cocineros y los productores es continuo, lo sabemos. Así, la mejor materia prima de la capital son las fresas ecológicas Mara de Bois, cultivada en la vega del Jarama por Fresas de Monjarama. La Ardosa, por centenaria y Casa Mira, por ser otro clásico también vieron su trabajo destacado.