Nuevos candidatos

Me creerán cuando les cuento que esta semana ha sido de infarto para los miembros del Partido Popular de Madrid y para el de toda España. Cuantos acontecimientos, cuantas novedades y por qué no decirlo cuantas incertidumbres. Verdad es que las elecciones andaluzas y sus consecuencias han ocupado el centro del análisis político pero no es menos cierto que a la transición andaluza se ha sumado la elección de candidatos para la próxima cita electoral de Mayo. Andalucía ha cerrado un ciclo que parecía ser eterno, algunos debían entender que nada es eterno en política y tener un mejor perder, que hay que ver la que están armando.

El pasado domingo terminábamos la semana madrileña con la presentación de los candidatos al Ayuntamiento para Madrid y a la Comunidad de Madrid. Nuestro Presidente Nacional, Pablo Casado, ha escogido un tándem potente, con ilusión y sin pelos en la lengua, que sin duda va a defender con fuerza los principios del Partido Popular. En un acto lleno a rebosar, hubo que habilitar pantallas exteriores para tantas personas que no pudieron entrar en el salón de actos donde se celebraba por exceso de aforo. Se percibía el entusiasmo del público no solo por la numerosa asistencia sino también por el calor y la ilusión que se respiraba. Hacía tiempo que no presenciaba yo un acto tan potente.

Nuestros candidatos, José Luis Martínez Almeida e Isabel Díaz Ayuso tienen un componente en común que resulta fundamental para enfrentarse a unas elecciones, las ganas y la ilusión de trabajar para que los madrileños tengan una vida sea más llevadera tras cuatro años de complicaciones, presiones, mentiras, falsas propagandas e impuestos cada vez más elevados. Unos años de fracasos consecutivos y de unos brindis al sol inaceptables. Si no recuerden la lista de grandes éxitos de Carmena: los foros locales, los presupuestos participativos, la descentralización de competencias en las Juntas de distrito, el Madrid Central, me falta espacio para enumerar su lista de éxitos.

Afortunadamente ya ha comenzado la cuenta atrás. El pistoletazo de salida a las futuras elecciones municipales, autonómicas y europeas del 26 de mayo, ya se ha producido. En el grupo popular de Madrid llevamos con los motores en marcha desde hace mucho tiempo, para conocer de primera mano los problemas que tienen los ciudadanos que debe ser lo que nos ocupe. Comenzamos ahora otra etapa con gran ilusión y fuerza para conseguir contemplar de cerca a la castiza Diosa Cibeles. A la peculiar Alcaldesa Carmena, solo le restan 130 días de estar sentada en su trono. Si analizamos este periodo podríamos afirmar sin ningún remordimiento lo poco ha hecho en estos casi cuatro años de mandato. A parte de dar subvenciones a dedo a sus afines ideológicos, para crear la famosa red clientelar que tan bien definió Iñigo Errejón; talar árboles, tener las calles sucias, no arreglar los parques, ni las calzadas, ni las aceras, tener al SAMUR Social desbordado, crear conflictos con la Policía Municipal, no recuerdo mejoras relevantes. El Madrid de los cuidados, de los abrazos, de la solidaridad, ha fracasado. Ojalá nuestra Capital vuelva a ser el Madrid que era, potencia económica a nivel mundial, pionero en las políticas sociales, una ciudad amable y que respondía ante los problemas de los ciudadanos y donde se cumplían las leyes y se respetaba la propiedad privada. Jorge García Castaño, Concejal de Ahora Madrid, afirma con desparpajo que los proyectos que se presentan a la próxima cita electoral son únicamente dos: el suyo, que supone la modernización de la ciudad y el de los demás que representa un discurso machista, homófobo y racista. ¡Toma objetividad y respeto al adversario! Mejor sería que ese cuento se lo explique a sus compañeros de partido que no hacen otra cosa que meter la pata con estos asuntos de la igualdad. Recuerden las palabras de Pablo Iglesias o de su concejal Carlos Sánchez. Que nuestro partido lleva muchos años luchando por la igualdad entre hombres y mujeres, por los derechos de los inmigrantes y por los del colectivo LGTBIQ+, aunque les pese, mientras sus políticas sociales han resultado ser su gran falacia.

Mientras todo esto sucede en el grupo municipal popular seguimos inquietos por la futura campaña, el humor siempre es buena medicina para el ánimo ¿La hará la Alcaldesa Carmena, en el trono que se mandó hacer para la Cabalgata? ¿Seguirán contándonos que somos la ciudad de la libertad, los cuidados y los abrazos? En una ciudad en la que todo son prohibiciones, intromisiones en la vida privada de los ciudadanos con intentos de manipulación de su pensamiento para que comprendan cómo tienen que vivir, pensar y sentir, la vanidad que demuestra este equipo de gobierno resulta algo cómica. Están en un proceso de desesperación palpable, ¡se veía venir! Reproduzco las palabras de nuestro futuro Alcalde José Luis Martinez Almeida: “para ganar las próximas elecciones, a la izquierda radical no le van a valer ni los escraches, ni la mentira a la que nos tienen acostumbrados cuando no les gustan los resultados de las urnas. En Madrid estamos hartos de ese sectarismo populista” Lo que no me pueden negar es que el momento es apasionante, por su complejidad aunque todos deseamos que finalice este “experimento fracasado” y Madrid vuelva a ser la ciudad que fue, también esperamos que el Doctor Sanchez explique bien en Estrasburgo el por qué gobierna con aquellos que quieren descuartizar España tras unos pactos cuanto menos inquietantes. Habría que pensar sobre qué coherencia tiene un presidente que alerta sobre los extremismos y al mismo tiempo gobierna con ellos. Qué disparate, mis queridos amigos.