Lo que nunca se hace cuando se visita Florencia

Cuando se aterriza en esta preciosa ciudad, no sabe uno por dónde empezar. Hay tanto que ver, tanto que aprender, tanto que visitar que lo normal es llegar a la plaza principal y arrancar.

Entre las galerías, las basílicas, las plazas, las capillas, los palazzos y claro está la gastronomía, las horas se van volando.

Cada una de las visitas están repletas de información, encima, ahora con los móviles nos movemos de un sitio a otro más lentamente. Por lo general se visita en grupo, en pareja o inclusive solos, pero la visita a Florencia es lo que es, imprescindible, intensa y maravillosa.

Generalmente no se piensa en lo bien que vendría, al final de una jornada intensísima, sentarse en una cómoda butaca en un teatro.

Cristiano Chiarot, el máximo responsable del Teatro Maggio Musicale Fiorentino, nos comentó durante su visita a Roma, que pensando en lo mucho que le gusta a la gente Florencia, ha creado un programa para esta proxima estación adaptado para todo el mundo. Se sabe que cuando se llega a Florencia no se para, la gente no quiere ni detenerse a comer en plan almuerzo largo, se come una pizza y se sigue, hay mil cosas que apender y para visitar, pero su propuesta me ha parecido de lo más agradable: ¿por qué no vamos, al final de una jornada extenuante, a un maravilloso teatro a escuchar una música apasionante, a darle a nuestras pupilas un momento de placer, a disfrutar de un bellísimo escenario y a sentir y ver actuar a grandes actores, cantantes, bailarines, músicos y a relajarnos un poco?

A mi por lo menos, nunca se me hubiera ocurrido ir al teatro estando en Florencia, sin embargo, sólo el hecho de pensarlo ahora, me relaja. El programa del Maggio Musicale Fiorentino es amplísimo y sobretodo accesible en precios, programa y transporte.

Florencia es una ciudad pequeña, pero cuando estamos cansados todo nos parece lejos. Cristiano Chiarot, nos contó que se podrá llegar al teatro directamente en tren.

Otra de mis dudas surgió, cuando vi en el calendario nombres de óperas clásicas que me hizo recordar cuando me metí a ver una obra en Berlín, después de un día agotador, produciéndome una sensación nada agradable, que al no enterarme de nada, en cierta manera me arrepentí de no haber seguido pateando la ciudad o de no haberme metido en un sitio para cenar un poco más decentemente que las salchichas que me había comido durante el día. Me ha gustado la explicación que Chiarot me dio al respecto “nuestra Traviata es fácil de entender” la hacemos de tal manera que todo el mundo la entienda y lo pase bien.

Bueno pues ya sabéis, si queréis sentaros después de un dia intenso en Florencia, descansar y disfrutar. Ir al teatro, no es tan complicado.