Pillán a un guardia civil que hacía favores a cambio de jamones y comidas en Ciudad Real
La Fiscalía pide una pena de 15 años y seis meses de prisión por los delitos de cohecho, revelación de secretos y falsedad documental
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Un agente de la Guardia Civil de Almadén (Ciudad Real) ha sido pillado haciendo "favores" a su cuñado y a otras cuatro personas más a cambio de "pequeños regalos".
En este sentido, el próximo viernes 4 de octubre, la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Ciudad Real juzgará al agente J.L.G.L como presunto autor de los delitos de cohecho, revelación de secretos y falsedad documental por los que la Fiscalía pide una pena de 15 años y seis meses de prisión.
Así mismo, el cuñado del guardia civil se enfrenta a seis años y medio de prisión por un delito de cohecho y por otro de inducción al delito de descubrimiento y otras cuatros personas más se enfrentan a penas de entre seis y dos años de prisión por los delitos de cohecho y de falsedad documental.
La operación 'Cinabrio' comenzó en 2021 tras las sospechas vertidas sobre este agente que supuestamente recibía regalos a cambio de favores relacionados con su puesto de autoridad y poder.
Uno de estos favores fue acceder al Sistema SIGO (Sistema Integrado de Gestión Operativa, Análisis y Seguridad Ciudadana) de la Guardia Civil para comprobar los datos de una matrícula de un vehículo a cambio de ser posteriormente invitado a una montería de jabalíes.
Por otro lado, se le acusa de hacer un pliego de descargo en una denuncia por conducción temeraria al conductor de un quad, además de haber accedido al Sistema SIGO para decirle al propietario de un establecimiento hostelero que el camarero que tenía pensado contratar carecía de antecedentes penales.
Por todas estas acciones, el guardia civil recibió un jamón y fue invitado a comer un "guarrillo", según las conversaciones telefónicas que el acusado tuvo y que habían sido interceptadas por agentes de asuntos internos de la Guardia Civil.
El Ministerio Fiscal pide para el guardia civil acusado una pena de seis años de prisión por un delito continuado de cohecho; cinco años por un delito continuado de descubrimiento y revelación de secretos, y cuatro años y seis meses más por un delito de falsedad documental.
El juicio debería de haberse celebrado el pasado mes de mayo, pero fue suspendido tras no haberse alcanzado el mínimo de candidatos para elegir al Tribunal del Jurado. Finalmente, los seis acusados se sentarán en el banquillo este viernes.