Laicos en la Iglesia: la sal y la luz en la familia, la cultura o la economía

Como cada año por estas fechas, todas las Diócesis de Castilla y León excepto la leonesa y la de Astorga, se reúnen en la localidad vallisoletana de Villagarcía de Campos para discutir sobre asuntos de actualidad que atañen a la vida y comportamientos cristianos. En esta ocasión, y bajo la presidencia del cardenal arzobispo de Valladolid, Ricardo Blázquez, un centenar de obispos, vicarios y arciprestes de la Comunidad debaten hasta mañana sobre los laicos y su misión en una Iglesia, como la actual , necesitada de vocaciones sacerdotales.

El objetivo de este encuentro es confirmar todo lo que se vivía hace menos de un mes en Madrid durante el Congreso de Laicos “Pueblo de Dios en salida”, donde se reafirmaba la importancia de que los creyentes y fieles cristianos, cualquiera que sea su vocación, han de reforzar su presencia en la sociedad y activar procesos de diálogo en la sociedad civil y trasladar con alegría y novedad el evangelio con su modo de vivir, ya sea desde la cultura, la economía o la política. “El laico tiene su propia misión en virtud de su bautismo: ser testigo. Y su misión tiene que ser la de convertirse en la sal y la luz en parcelas fundamentales como la familia, la cultura o la economía", señala Ángel Rivilla, el secretario de los obispos regionales, en declaraciones facilitadas por el Arzobispado de Valladolid.

Además de los momentos de oración y de fraternidad, y de los testimonios diocesanos, los asistentes han tenido la oportunidad de asistir a dos ponencias. La primera, impartida por el doctor en teología por la Pontificia Universidad Gregoriana y profesor de teología fundamental y eclesiología tanto en la Facultad de Teología de Cataluña como en la Gregoriana, Salvador Pié-Ninot, y de la presidenta de Acción Católica General, Eva Fernández Mateo.

Estos encuentros regionales constituyen una reunión anual que se estableció para generar una conciencia de comunidad en la Iglesia ‘castellana’ y marcar unas orientaciones pastorales comunes para todas las diócesis participantes, en la que a lo largo de estos 39 años se han tratado diversas materias como la enseñanza, las unidades pastorales, la catequesis, la liturgia, el patrimonio cultural, la iniciación cristiana o la caridad, entre otros. Es el foro más antiguo y perseverante de la Iglesia en Castilla; el encuentro de referencia para otros tantos que se celebran en los distintos ámbitos.