Se reanuda la caza del cocodrilo del Nilo en Simancas

El dispositivo de búsqueda del posible cocodrilo en la confluencia de los ríos Duero y Pisuerga, en la zona conocida como La Pesqueruela de la localidad vallisoletana de Simancas, donde el afluente se junta al gran río que nos une con Portugal, se ha reanudado este lunes con la presencia de expertos en reptiles de una asociación que colabora con el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico (Miteco) y al que se ha sumado también una zodiac del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil.

Este domingo concluía una intensa jornada de búsqueda con un amplio dispositivo formado por agentes de la policía local de la localidad vallisoletana de Simancas y del Seprona de la Guardia Civil al que se sumaba un dron que sobrevolaba la zona todo el día para intentar dar caza a este reptil, que no daba sus frutos aunque sí que se encontraban restos de un pez devorado y vegetación aplastada que ha permitido a los investigadores encontrar su posible nido, por lo que el cerco se va estrechando.

Además, se colocaban trampas y carnaza por las riberas para provocar al animal y hacerle salir de su escondrijo y comprobar fielmente su tamaño. Un biólogo, por su parte, identificaba sobre el terreno algunas huellas en la ribera donde se supone que ha sido visto el reptil, que pueden corresponderse con las de un cocodrilo del Nilo, una especie considerada peligrosa, pero también asustadiza y que podría llegar a medir hasta tres metros. Según los expertos que citan estas fuentes, se pretende rastrear la zona con precaución para evitar que se desplace fuera del área de en torno a cinco kilómetros en la que se considera que se mantendrá de no ser molestado, para facilitar su captura.

Pese a todo, nadie da por seguro que se pueda tratar de un cocodrilo. En este sentido, Arturo Pascual, un especialista en reptiles que forma parte del dispositivo de búsqueda afirmaba esta mañana en la Cope, tras ser entrevistado por Carlos Herrera, que las únicas evidencias apuntan a la presencia de un animal mucho más grande que los propios de la fauna autóctona pero queno garantiza que sea un cocodrilo. Durante la entrevista, insistía en que lo único que tienen son indicios de que el aplastamiento de maleza que han detectado lo ha tenido que hacer un animal de gran tamaño “mucho más grande que la fauna existente en esta zona” así como los relatos de un policía local "que estaba muy convencido de lo que había visto”.

Alerta en los municipios de la zona

La posible presencia de este cocodrilo en aguas del Duero tiene en vilo también a los vecinos de localidades cercanas a Simancas y que también están regadas por el gran río. Es el caso de Tordesillas, donde anoche, casi de madrugada, su Ayuntamiento emitía un bando municipal aconsejando a sus vecinos no acercarse a las orillas del Duero por la peligrosidad del reptil, especialmente a los pescadores, y ni mucho menos introducirse en el agua, sobre todo por los piragüistas, hasta que se capture a este animal al que se busca con un amplio dispositivo.

También se encuentran ojo avizor los vecinos de los municipios cercanos de San Miguel del Pino y Villamarciel. De hecho, el Ayuntamiento de esta última localidad también ha lanzado un bando municipal en el que comunica la existencia de este cocodrilo que podría haberse refugiado por los alrededores de la zona. Mientras que desdeel Consistorio de Simancas, además, han puesto a disposición losteléfonos 657822949 y 685860652 además del servicio de emergencias 112 y el 983795929 de la Guardia Civil para que cualquier persona que aviste al reptil pueda avisar rápidamente de su ubicación para poder atraparle

Avistado el viernes por vez primera

El animal, según parece, fue avistado el pasado viernes por un grupo de jóvenes, y un agente de la policía local de este municipio del alfoz de Valladolid lo confirmaba este sábado, al asegurar que había visto también a este cocodrilo, momento en el cual daba el aviso al servicio de emergencias 112 de Castilla y León para proceder a su búsqueda, a la que se han sumado agentes del Seprona de la Guardia Civil.

Acto seguido, la policía local de Simancas acotaba una parte de la ribera donde suelen acudir pescadores para evitar que estas personas se acerquen a la orilla y puedan ser atacados mortalmente por este animal. No en vano, se trata de una zona muy transitada, de choperas y muy agradable para pasear y que además se encuentra próxima a una urbanización de viviendas muy conocida en la provincia denominada Entrepinos en la que viven muchas familias.

Las primeras hipótesis que barajan los investigadores es que el cocodrilo podría haberse escapado de la casa de alguna persona que lo tuviera como mascota, aunque de momento nadie ha reclamado al animal. También se apuntaba al principio a la posibilidad de que pudiera ser un siluro de gran tamaño, ya que es una zona en la que estos peces suelen abundar, si bien, esta opción parece se descartaba al darse por veraces los avistamientos de los jóvenes y el policía local y encontrarse este domingo los restos del pez y un lugar que podría ser su guarida.