Exigen a la patronal CEOE más rigor en la prevención ante la alta siniestralidad laboral

En lo que va de año se han producido en Castilla y León un total de 7.188 accidentes de trabajo, 340 más que en el mismo periodo que el año pasado, de los que 16 han sido mortales. Por este motivo, desde CCOO Castilla y León se ha exigido a la patronal que se siente a negociar la política de prevención de riesgos laborales con el fin de atajar la alta siniestralidad.

“Estamos ante unas cifras dramáticas que demuestran la falta de rigor en la aplicación de la Ley de Prevención por parte de las empresas. También que la siniestralidad está favorecida por las cadenas de subcontratación, la precariedad laboral y la permisividad administrativa”, señalaba el secretario de Acción Sindical, Salud Laboral y Medio Ambiente de este sindicato en la Comunidad, Fernando Fraile.

Además de las víctimas mortales se han producido 44 accidentes graves y 7.128 leves, lo que supone un incremento del 5 por ciento. Hay que destacar que entre los accidentes mortales hay siete siniestros que corresponden a lesiones no traumáticas como infartos e ictus o daños relacionados directamente con la organización del trabajo y el estrés. También se han producido tres “in itínere”, uno por aplastamiento, otro por sepultamiento, otros dos por caída por objeto sobre el trabajador y uno por atrapamiento a los que hay que sumar otros dos por tráfico.

Por sectores, es el de la construcción el que acumula un mayor incremento de accidentes, con una subida del 20 por ciento, seguido del Servicios con un 10,66 por ciento y el agrario con un 10,33 por ciento, y se ha producido un descenso en la industria con 140 accidentes menos. Y por provincias, el número de accidentes con baja se ha reducido en Ávila, Burgos, León y Palencia.

Desde CCOO se denuncia la falta de cultura preventiva entre el tejido empresarial, unida a la inestabilidad laboral, y a las condiciones precarias del empleo, temporalidad y jornadas interminables de trabajo, por lo que “queremos hacer un llamamiento férreo a la responsabilidad de los empresarios para que cumplan con lo legalmente establecido con el control horario para reducir la lacra que es la siniestralidad”.

Por último, Fraile demanda “más inspecciones, más control y más sanciones para que los empresarios negligentes no tengan la percepción de que su irresponsabilidad pueda quedar impune y para que ningún trabajador o trabajadora pierda la vida en accidente de trabajo”.