Transporte
Buscyl alcanza las 534.000 tarjetas digitales emitidas y Movilidad inicia la prueba piloto de la central de reservas
Sanz Merino reconoce que se está trabajando en “cortafuegos” para evitar un “uso indebido” de las reservas y defender así “a quien usa realmente el autobús”
El sistema Buscyl de transporte interurbano y metropolitano gratuito en Castilla y León alcanzó este jueves las 534.000 tarjetas QR digitales emitidas y superó los 2,3 millones de viajes en los casi tres meses que lleva operativo para toda la ciudadanía, mientras la Consejería de Movilidad y Transformación Digital inició la prueba piloto de una central de reservas para “unificar” los servicios de todos los operadores del sistema en una sola aplicación.
Así lo comunicó hoy el consejero de Movilidad y Transformación Digital, José Luis Sanz Merino, minutos antes de su participación en el Club de Prensa ‘Innovación, normativa y digitalización: claves para el futuro del transporte en Castilla y León’ que organiza la edición de El Mundo en la Comunidad en un hotel de Valladolid.
En declaraciones recogidas por Ical, Sanz Merino detalló que la fase de implantación de las tarjetas digitales por QR ya está “prácticamente terminado” y ahora se trabaja en completar la instalación del equipamiento embarcado y no embarcado, con la puesta en marcha de casi 400 puntos con información digital.
En todo caso, el consejero de Movilidad situó en “finales de febrero” el límite temporal para completar todo el proceso de instalación de la infraestructura, aunque matizó que “otra cosa es la operatividad del sistema”, que incluye funciones para monitorizar “en tiempo real” quién sube al autobús, qué recorrido está haciendo o dónde están cada uno de los casi 2.000 autobuses que prestan el servicio para trasladar dicha información a las marquesinas digitales que ya se están instalando.
En una fase posterior también se incluye el diseño de una aplicación que pueda dar “en tiempo real, en el teléfono móvil, esa información”, o la central de reservas que se encuentra en pruebas y que aunque desde la Consejería se desea poner en marcha “lo antes posible”, requiere de conectar con el sistema a todas las empresas concesionarias del servicio para poder “unificar” la reserva de plaza.
“Estos no son temas que se puedan hacer de un día para otro”, confesó Sanz Merino antes de plantear que, además, algunos de estos procesos requieren la puesta en marcha de “cortafuegos” para evitar “un uso indebido” como el detectado en la línea Zamora-Salamanca, en la que hubo que limitar la reserva previa porque el “abuso” de algunos usuarios, con “la reserva y su cancelación en un muy breve plazo”, llevó al “colapso”.
Por ello, y pese a la demanda de los usuarios de ampliar el periodo de reserva previa en todas las líneas por encima de los cinco días actuales, Sanz Merino aseguró que la Junta debe actuar con cautela y “rigor” para salir “en defensa de quien usa realmente el autobús y no de quien lo hace por si acaso o, quizá, con otra motivación”.
Segundo servicio “más universal”
Eso sí, Sanz Merino defendió el sistema Buscyl y el conjunto de medidas de la Junta en materia de transportes porque permiten establecer un servicio “muy universal y accesible, después de la Sanidad, el más universal” de la Comunidad. Y es que no solo se están adoptando decisiones “alineadas con lo que se está haciendo en todos los sitios en los ámbitos urbanos”, sino que “se presta especial atención al medio rural”.
Un medio en el que el consejero de Movilidad destacó “la cotidianidad” con la que los ciudadanos se están adaptando a la usabilidad de las herramientas digitales, como demuestra que de todas las tarjetas Buscyl, más de medio millón se han emitido a través del método QR mientras que “solo 100.000 se han tenido que hacer en formato papel”. “Dice mucho de las capacidades y la manera de enfocar la vida diaria de los ciudadanos de Castilla y León”, apuntó Sanz Merino.
No obstante, el consejero aseguró que el nuevo modelo de movilidad de la Junta de Castilla y León es, “en realidad, el modelo de siempre”, puesto que la premisa principal se basa en “la necesidad de mantener y dar servicio al máximo de ciudadanos, vivan donde vivan”.
En ese punto, realizó un repaso del cambio que el sistema de transporte de Castilla y León ha tenido en los últimos 20 años “con ese objetivo”, desde el transporte a la demanda hasta el bono rural gratuito y el actual Buscyl, que se suma a los anteriores gracias también a los 34 millones captados de fondos europeos para el despliegue del sistema Buscyl.
Un sistema que se incardina en el vector de la implantación de las nuevas tecnologías inteligentes al sector del transporte y que centra la jornada de hoy, organizada por el Mundo – Diario de Castilla y León, en la que Sanz Merino destacó la presencia de “aliados” en la labor de la Junta de “modernización del transporte público” con organizaciones como la Federación Empresarial Castellano y Leonesa de Transporte en Autobús (Fecylbus), con su presidente Fernando García a la cabeza, o empresas como Mobico y Alsa o Proconsi, cuyos CEO, María Ángeles Vicente y Tomás Castro, también participaron en la jornada, como el vicepresidente de Conetic y presidente de Semicrol, Vicente Alciturri.
Como patrocinador de la jornada, el CEO de Proconsi, Tomás Castro, también atendió previamente a los medios para destacar una cita “de mucho interés” para un sector que “lleva el transporte tanto urbano como interurbano” de Castilla y León y puede así “hablar y avanzar todo lo que son las innovaciones y tecnologías que nos esperan en un mundo tan digitalizado y por digitalizar, con un tema muy disruptivo como la inteligencia artificial”.
Castro destacó asimismo la participación de la Junta por “sus pasos hacia esa digitalización” que también implican “la comunicación e interoperabilidad del futuro” con sistemas como Buscyl o la inversión en ciberseguridad, que también llevan a cabo las empresas que “hoy gestionan nuestro transporte”.