Turismo

Esta es la mejor plaza de pueblo para disfrutar en buena compañía

Fue construida en 1550 para que las familias nobles disfrutaran de los festejos taurinos

Plaza Mayor de Pedraza, Segovia
Plaza Mayor de Pedraza, SegoviaCivitatisShutterstock

Las plazas son las zonas de reunión de los habitantes de esas ciudades o pueblos. Se trata de un espacio urbano público, amplio o pequeño y descubierto, en el que se suelen realizar gran variedad de actividades. Las hay de múltiples formas y tamaños, y construidas en todas las épocas. Por su relevancia y vitalidad dentro de la estructura de una ciudad se las considera también como salones urbanos.

Con frecuencia son el elemento nuclear de una población, el lugar alrededor del cual comienzan a levantarse las edificaciones más representativas, con lo que se convierten en símbolos del poder, y en ocasiones reflejan la dualidad de poder (religioso y político). Son típicas en muchos pueblos la plaza del ayuntamiento y la plaza de la iglesia; en localidades mayores son más propias la plaza de la catedral o la plaza del palacio.

Las plazas son el centro por excelencia de la vida urbana. En ellas se concentran gran cantidad de actividades sociales, comerciales y culturales. Las funciones simbólicas, tanto políticas como religiosas son de gran importancia en estos espacios, siendo elegidas para la celebración de coronaciones, ejecuciones, manifestaciones, procesiones, canonizaciones...

A menudo son elegidas para levantar en ellas monumentos conmemorativos o estatuas, ya que son espacios singulares y adecuados para los mecanismos de mantenimiento de la memoria histórica. Además, al ser lugares de encuentro, albergan actividades lúdicas y festivas: fiestas, juegos, espectáculos, deportes, mercadillos o cualquier acto público imaginable. La función económica (plaza de mercado) responde a la vitalidad de las transacciones espontáneas, pero también las hacen ser objeto de especial atención y control por los poderes públicos.

Castilla y León cuenta con el privilegio de contar con la Plaza Mayor más antigua de España, que es la de Valladolid, y la más grande que es la de la localidad vallisoletana de Medina del Campo. Pero en esta ocasión nos vamos a fijar más en la belleza, que en el tamaño y en la antigüedad, aunque de la que vamos a hablar tiene sus años ya, y es espectacular. Y es que está considerada como la mejor plaza de pueblo de España para disfrutar en buena compañía. Se trata de la plaza de la localidad segoviana de Pedraza.

Es la quintaesencia de la Villa. Una típica plaza castellana, que se ha ido formando poco a poco a lo largo de los años. Irregular y algo anárquica, es una plaza hecha a retazos, con derribos aprovechados. Fue creada para que las familias nobles de la Villa disfrutaran desde sus balcones, de los festejos taurinos celebrados desde 1550.

Pocas familias fueron las privilegiadas de vivir en esta Plaza, conservándose todavía sus palacios y casonas datadas en los siglos XVI y XVII, presididas en su conjunto por imponentes fachadas y elegantes escudos de armas, encargados de recordarnos hoy, a quién pertenecieron entonces.

Nadie la diseñó y es hermosa, una de las plazas mayores más bellas de España. El conjunto más llamativo son las casas porticadas frente a la iglesia. Originalmente dos casas del siglo XVI convertidas luego en cuatro viviendas.

Los soportales se añadieron con posterioridad una vez que los señores feudales abandonaron el castillo al perder sus privilegios sobre la Villa. De hecho, los fustes y capiteles de las columnas pudieran proceder del propio castillo.

A día de hoy, sigue transformándose en plaza de toros, luciendo sus mejores galas durante las Fiestas Patronales en honor a la Virgen de Carrascal, del 6 al 11 de septiembre.

Adosado a la Plaza de Pedraza se encuentra el Castillo, que es una fortaleza edificada en el siglo XIII y reedificada en el siglo XV. De ese siglo es la torre del homenaje. Dentro del castillo, en la escalera que da paso al aljibe, se conserva el escudo de los Herrera, anteriores a los Fernández de Velasco.

Los duques de Frías, condestables de Castilla, volvieron a reformarlo en el siglo XVI de donde data la estructura que actualmente se ve. A este castillo se vinculan sucesos históricos como la prisión de los hijos del rey de Francisco I de Francia desde 1525 a 1529 y también alguna que otra leyenda.

En 1926, cuando lo adquirió el pintor Ignacio Zuloaga, el interior del castillo estaba arruinado. Restauró una de las torres, donde instaló un taller y pintó paisajes y retratos de las gentes de Pedraza.

Junto a la de Pedraza, también en la provincia de Segovia, una plaza impresionante es la de Ayllón, que es una plaza porticada típica del estilo arquitectónico castellano. Está rodeada por edificios con soportales y balcones de madera, lo que le confiere un aspecto pintoresco y tradicional. La uniformidad arquitectónica y la piedra como material predominante le dan al enclave un encanto único.

En ella se sitúan el poder civil -ayuntamiento- y el religioso representado en la iglesia de Santa María de estilo neoclásico, que ha recibido elementos procedentes de las parroquias extinguidas. Su planta es de cruz latina y el campanario se remata con una espadaña.

En la portada dos columnas estriadas sustentan la hornacina con la imagen de la Virgen. En la plaza mayor, frente a la Casa del Ayuntamiento, se localiza la Iglesia de San Miguel. De traza románica, consta de una nave, atrio, ábside cilíndrico y espadaña. En el siglo XV se construye el pórtico en el que se alza el escudo de armas de la familia Contreras. En 1675 el Cabildo acuerda hacer un mirador sobre los soportales para poder contemplar los festejos taurinos que se celebraban en la Plaza Mayor. En el centro de la plaza se ubica una fuente de cuatro caños erigida en 1892, en conmemoración al IV centenario del descubrimiento de América.

Y en el tercer puesto del pódium se encuentra la Plaza Mayor de la localidad zamorana de Puebla de Sanabria, que se encuentra en la zona alta de la villa, justo detrás del castillo. En ella se encuentran dos importantes edificios, el del Ayuntamiento y la iglesia parroquial del Azogue, junto a la Ermita de San Cayetano.

El resto de edificios que rodean la plaza son casonas de piedra de dos alturas, caracterizadas por sus floridos balcones y corredores de madera. Ideal para ver discurrir el tiempo degustando alguna de las especialidades típicas de la zona.