La localidad vallisoletana de Villalón de Campos está de fiesta este fin de semana de la mano de su XXIV Mercado Comarcal y XXI Feria Agroalimentaria.

Eventos marcados en rojo en el calendario de los vecinos de este municipio terracampino, pero también de muchas pequeñas empresas agroalimentarias y de artesanía, que tienen en este punto de encuentro una buena oportunidad de dar a conocer sus productos y comercializarlos.

El consejero de la Presidencia, Luis Miguel González Gago, se acercaba hasta esta localidad para inaugurar esta cita que espera atraer a más de 5.000 personas entre hoy y mañana.

«Esta celebración es parte viva de la historia de Villalón de Campos que, durante siglos, ha sido lugar de encuentro de productores y comerciantes y se ha consolidado como un referente nacional en el calendario de ferias agroalimentarias, dando visibilidad a los productos locales, destacaba.

González Gago reafirmaba el compromiso de la Junta con el desarrollo y el futuro de los pueblos de la comunidad, aportando anualmente importantes recursos económicos tanto a los ayuntamientos como a las mancomunidades, cuyas cuantías están garantizadas por ley.

En concreto, y en lo que a su departamento se refiere, destacaba la apuesta por el asentamiento de los jóvenes en los pequeños municipios de Castilla y León, para seguir ayudando a construir un medio rural vivo, moderno y con oportunidades.

En este sentido, González Gago defendía la importancia de programas destinados a fortalecer la cohesión territorial y asegurar el futuro del medio rural, en alusión a iniciativas como «Pasaporte de Vuelta», «Volver a Castilla y León» o las ayudas para mantener abiertos los bares y los centros de ocio en los pueblos.

Productos selectos

Villalón acogerá a artesanos alfareros, orfebres, carpinteros,guarnicioneros además de una feria selecta «con los mejores productos del campo castellano, según destacaba el alcalde del municipio, José Ángel Alonso.

Así, entre los productos que podrán adquirirse figuran legumbres, hortalizas, lácteos, cárnicos, repostería y otros más, elaborados «por manos sabias que respetan la tradición», decía el regidor.

Los visitantes podrán disfrutar de artículos como cerámica, flores, jabones, velas, hierbas medicinales, forja o complementos artesanales.

Teatro de calle, malabares, danzas de fuego, cetrería, talleres de oficios tradicionales, espectáculos circenses, música y animación completan la oferta.