Industria

García-Gallardo: "No hace falta destruir la industria para proteger el medio ambiente"

El vicepresidente de la Junta reivindica en Bruselas una transición ecológica en la que la defensa de la naturaleza y de la economía sean compatibles

García-Gallardo interviene en el Intergrupo por el Futuro de la Industria del Automóvil del Comité de las Regiones celebrado en Bruselas.
García-Gallardo interviene en el Intergrupo por el Futuro de la Industria del Automóvil del Comité de las Regiones celebrado en Bruselas. JcylLa Razón

El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha participado este martes en Bruselas en el Intergrupo por el Futuro de la Industria del Automóvil del Comité de las Regiones celebrado en la capital belga.

Allí, el número dos del Gobierno regional no se ha mordido la lengua en defensa de los intereses de los castellanos y leoneses y ha defendido con vehemencia al sector del automóvil de la Comunidad. Una industria que, por otra parte, es motor de la economía regional, ya que ocupa a 35.000 personas y que produce el 20 por ciento de todos los automóviles de España, con factorías de referencia como las de Renault en Valladolid y Palencia, la de Iveco en la capital vallisoletana o la de Nissan en Ávila, a las que hay que sumar una potente industria auxiliar.

Durante su intervención, el líder de Vox en la Comunidad reivindicaba una transición ecológica en la que la defensa de la naturaleza y de la economía sean compatibles. “Para proteger el medio ambiente no es necesario destruir la industria", decía García-Gallardo, al recordar que una transición forzada nunca será justa porque dejará atrás a muchas personas afectadas.

Además, advertía al Pacto Verde europeo que en Castilla y León "no nos vamos a quedar parados si la legislación europea espera de nosotros que reduzcamos nuestra producción de automóviles". García-Gallardo aseguraba, contundente, que la Junta defenderá con uñas y dientes los intereses de nuestra industria y apostaba por que tengan cabida todas las formas de movilidad existentes, desde los coches eléctricos, pasando por los híbridos y los convencionales. "Queremos una industria de la automoción que innove y sea competitiva”, destacaba, a la vez que recordaba las dificultades de los vehículos europeos a la hora de competir con otros procedentes de países que subvencionan sus industrias.

Mayor ralentización

Por otro lado, el vicepresidente de la Junta se felicitaba por el hecho de que los países de la Unión Europea acordaran el pasado 25 de septiembre posponer la entrada en vigor de la norma Euro 7. "Toda nuestra industria decía que era imposible cumplirla y que iba a destruir la producción y muchos empleos, por lo que estamos contentos de que todos los estados miembros hayan entrado en el sentido común” y hayan dado más tiempo a la industria para adaptarse", apuntaba.

Y tras lamentar que los "elevados precios" de los vehículos están llevando a muchas personas a recurrir al mercado de segunda mano y envejecer el parque de vehículos, "porque no pueden permitírselos", García-Gallardo celebraba por tanto que la transición se haya ralentizado, si bien apostaba por ralentizarla aún más si cabe "porque la transición forzada hacia los coches eléctricos no es una buena decisión”, decía.