Sociedad

La Junta y la empresa Pascual redoblan su apuesta por la igualdad

Isabel Blanco destaca la apuesta decidida por la compañía por incorporar mujeres en los ámbitos laborales donde están infrarrepresentadas

Isabel Blanco junto con Sonia Pascual durante la firma del convenio
Isabel Blanco junto con Sonia Pascual durante la firma del convenioRicardo Ordóñez/Ical

En el largo camino ya recorrido por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, durante el que ha venido impulsando el empleo femenino en sectores productivos muy masculinizados o la definitiva integración de la mujer en la empresa, ha encontrado una nueva aliada con una amplia trayectoria promoviendo la igualdad entre sus 2.300 trabajadores: la empresa burgalesa Pascual, radicada en Aranda de Duero, fundada en 1969 por Tomás Pascual y con la que ha formalizado un protocolo de colaboración para establecer la unidad de acción y así seguir impulsando la incorporación de la mujer en este ámbito.

La consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, ha destacado, durante la firma celebrada en las instalaciones arandinas de la compañía, el compromiso de esta empresa no solo con las políticas de igualdad y la prevención de la violencia de género, sino con el liderazgo femenino. Blanco, quien ha suscrito el acuerdo con la consejera de la Corporación Empresarial Pascual, Sonia Pascual, ha agradecido a la empresa la disposición de colaborar con la Junta de Castilla y León a través de este texto, que refleja la voluntad que lleva mostrando desde hace años.

Se trata de un paso importante para avanzar en el proyecto ‘Empresas de Castilla y León comprometidas con la igualdad’, con el que se aúna la responsabilidad social de las grandes empresas de la Comunidad con las políticas de igualdad y de prevención de la violencia de género. Un acuerdo para actuar en el ámbito del empleo, espacio en el que se manifiestan muchas de las desigualdades, y acabar con las brechas salariales, romper los techos de cristal y avanzar en la conciliación. Tal y como ha puesto de manifiesto Isabel Blanco, no es sólo una cuestión ética, sino también estratégica, un factor de competitividad empresarial.

Acuerdos recogidos en el protocolo

Pascual cuenta con siete fábricas -tres de ellas en Castilla y León-, más de 2.300 empleados y llega a más de 50 países. En la Comunidad genera de forma directa, indirecta e inducida un impacto económico de más de 500 millones de euros anuales. En julio de 2022 aprobó el III Plan de Igualdad entre mujeres y hombres para el periodo 2022-2026, centrado en tres grandes objetivos: integrar el principio de igualdad de trato y oportunidades en todos los ámbitos; garantizar la ausencia de discriminación directa o indirecta por razón de sexo; y eliminar toda manifestación de discriminación en la promoción interna y selección para alcanzar una representación equilibrada de mujeres y hombres.

El protocolo suscrito por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades y Pascual recoge un marco de colaboración de al menos dos años, prorrogables por otros dos, y centrado en tres áreas principales: la formación de trabajadores en el ámbito de la igualdad en la empresa, el desarrollo de itinerarios formativos y sociolaborales para mujeres del medio rural y el fomento de la inserción de la mujer en el mercado de trabajo −con especial consideración a las mujeres en situación de vulnerabilidad−.

Entre los compromisos asumidos por la Junta, se encuentran la formación online o presencial en la promoción de la igualdad y la prevención de la violencia de género para trabajadores de Pascual; un servicio personalizado de asesoramiento para implantar medidas y planes de igualdad, junto con todas las prestaciones del programa ‘Multiplica’, cofinanciado con el Fondo Social Europeo Plus; poner a disposición de la compañía los canales del ‘Programa Empleo Mujer Castilla y León’ (Pemcyl) para la inserción laboral de las mujeres más vulnerables; y fortalecer el liderazgo, así como poner en marcha un laboratorio de innovación social que genere conocimiento y transferencia de aprendizajes.

Por su parte, la compañía arandina se compromete a facilitar dicha formación con perspectiva de género en corresponsabilidad y a detectar esas necesidades formativas orientadas esencialmente a la mujer rural o con dificultades para acceder al empleo, con el objetivo último de integrarse en Pascual. Además, fomentará la reinserción de las mujeres que quieran reincorporarse al mercado de trabajo tras periodos largos en excedencia por cuidados o la integración de aquellas en situación de vulnerabilidad. Se integrará en la Red de empresas del programa Pemcyl, incorporará la perspectiva de género en los procesos de formación interna para promover la igualdad y concienciar a toda la plantilla y se compromete también a la difusión del logo contra la violencia de género de la Administración autonómica cada 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres.

En definitiva, el protocolo no sólo fija unos objetivos concretos como son la promoción de la igualdad, la prevención de la violencia de género y el incremento de la presencia de las mujeres en determinadas áreas de trabajo, sino que establece un amplio abanico de iniciativas, medidas y pautas para alcanzarlos.

El proyecto ‘Empresas de Castilla y León comprometidas con la igualdad’ es uno de los pilares que sostiene la ambiciosa estrategia de la Junta de Castilla y León en este ámbito y en la que la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades cuenta con un papel esencial a través de diferentes actuaciones.

Es el caso del programa ‘Multiplica’, a través del cual se presta asesoramiento a aquellas entidades que se encuentren elaborando e implantando un plan de igualdad. El pasado año se atendieron 943 consultas, se asesoró a 234 empresas y se formó a 368 trabajadoras.