Curiosidades

El misterioso pronosticador del tiempo que acierta siempre

Esta persona, que no quiere dar su nombre ni desvela su método, ha adivinado y con mucha antelación algunas borrascas como el frío de estos últimos días

Un hombre camina bajo una intensa lluvia en la última borrasca
Un hombre camina bajo una intensa lluvia en la última borrascaBiel AliñoAgencia EFE

Al igual que en otras épocas no tan lejanas en España estaban de moda los videntes o futurólogos del estilo de Rappel o Aramis Fuster -personajes que lo petaban en televisión contando lo que le iba a pasar al famoso de turno, si se iba a casar, los hijos que iba a tener o el dinero que iba a ganar-, en estos tiempos que corren son las predicciones meteorológicas por parte de expertos y gurús de todo tipo las que están copando protagonismo e inundan los periódicos y redes sociales de noticias sobre la climatología que se avecina.

Hoy en día los sistemas que se utilizan para predecir la temperatura que hará y la posibilidad de lluvia son muy avanzados, pero, sin embargo, todavía se siguen utilizando otros métodos de toda la vida, técnicas más bien rudimentarias que usan sobre todo las gentes del campo que viven en zonas rurales fruto de la observación del cielo y de los vientos durante décadas.

Es el caso de las conocidas como Cabañuelas, que es un sistema muy utilizado por agricultores y también por los pastores que consiste en la observación de los cambios atmosféricos en los 12, 18 o 24 primeros días de enero o de agosto para así pronosticar el tiempo que hará en los meses siguientes, según lo define en su diccionario la Real Academia de la Lengua Española (RAE).El objetivo era predecir fenómenos meteorológicos y mejores o peores momentos para la siembra.

Entre estos expertos en las Cabañuelas se encuentra Jorge Rey, un joven adolescente burgalés que con apenas 14 años clavó el temporal Filomena que cubrió de manto blanco toda la geografía española, y que desde entonces se ha convertido en un fijo de las noticias que tienen que ver con la meteorología, ya sea a la hora de anunciar borrascas y cambios bruscos o a la hora de confirmar unos tiempo después que lo dijo se cumplió o no.

Pero hay otros pronosticadores del tiempo que están acertando con bastante eficacia la llegada de grandes borrascas que traen mucho agua o nieve a los que no conoce nadie. Es el caso de una persona, a la que llamaremos Juan (nombre ficticio) que, además, de momento tampoco quiere darse a conocer aunque reconoce a este periódico que lleva diez años acertando casi siempre en sus predicciones, sobre todo borrascas importantes que han azotado la Península Ibérica, como por ejemplo la mencionada anteriormente "Filomena" de hace dos inviernos.

Bueno, pues Juan, o alguien relacionado con él, colocaba hace semanas en un panel en el interior de la Universidad Europea Miguel de Cervantes (UEMC) de Valladolid un documento con una serie de predicciones meteorológicas que se supone que van a ocurrir este año. Y, de momento, la primera se ha cumplido.

En el cartel puede leerse lo siguiente: "Desde hoy 15.12-2022 (hace dos meses y medio) de la misma forma que fue pronosticado el tiempo la primera vez aquí, que cambiaría el tiempo el 24 de septiembre de 2022, para este 2023 se pronostica lo siguiente: Que desde el 3 de marzo se formará una borrasca que hará bajar las temperaturas hasta abril. Y desde el 3 de diciembre, también".

Pues bien, el caso es que la primera predicción se ha cumplido ya que en esta última semana ha hecho bastante frío, sobre todo de madrugada con temperaturas bajo cero, y eso que se hizo con dos meses y medio de antelación.

Pero no es la primera vez que acierta Juan, ya que el pasado año, en otro documento que también se colocó en la misma Universidad, también predijo y acertó el cambio que se iba a producir el pasado 24 de septiembre y otras borrascas más. Preguntado por este periódico por cómo es su modus operandi, esta persona anónima no quiere desvelarlo "porque cambiaría mi vida y no estoy dispuesto a ello", apunta, aunque señala que su método "no es nada raro" ni tampoco es una adivinación. Es más, aunque no desvela nada, sí que deja entrever que detrás hay algo de instinto, pero que, sobre todo, insiste en que es algo muy bueno.

De cara a este mes de marzo, augura que va a caer más agua, al menos unos 40 litros por metro cuadrado solo en Valladolid, dice. El resto del año -prosigue- será seco y lloverá poco, aunque más a corto plazo no se aventura a decir qué tiempo hará en Semana Santa a la espera de ese agua que asegura que llegará este mes con fuerza y espera que así sea, ya que si no, se le caerán otras predicciones que dice tener.