Cultura

La vida contada en versos a la luz de la luna

"A la noche le puse alas", segunda aventura literaria de la escritora y librera vallisoletana Almudena Ojosnegros Calderón

Almudena Ojosnegros lee uno de los poemas de "A la noche le puse alas"
Almudena Ojosnegros lee uno de los poemas de "A la noche le puse alas"Rodrigo OrtegaLa Razón

Decía el filósofo Aristóteles que en la poesía hay más verdad que en la historia. El gran poeta español Federico García Lorca aseguraba que la poesía es algo que anda en la calle cada día mientras que para el pensador y rapsoda hindú Rabindranath Tagore, la poesía es el eco de la melodía del universo que late en el corazón de los humanos.

Verdad, calle y corazón. Tres palabras que dicen mucho de lo que es la vida misma, y con las que se podría resumir también la tierna, fresca y libre poesía que escribe mimando a la lengua de Cervantes la vallisoletana Almudena Ojosnegros Calderón.

Una todavía "imberbe" literata, que lleva grabado a fuego el lema "a escribir se aprende escribiendo", que es librera de profesión y por pasión en Villa Serendipia -el castillo de las letras de Peñafiel-, lectora desde muy temprana edad y a quien le gustaba más que le regalasen libros que juguetes, y que acaba de lanzar al mercado su segundo libro, un poemario titulado "A la noche le puse alas", de Aliar Ediciones, con el que invita a viajar por las emociones humanas desde la soledad, el silencio y la calma que transmite la noche, la luz de la luna y las estrellas.

Se trata de una publicación muy cuidada en los detalles, desde la calidez del color sepia del papel hasta los dibujos que acompañan a algunos de los 69 poemas que forman parte de ella que rebosan sencillez, cotidianidad y verdad.

Un poemario en el que la autora humaniza estas emociones muchas veces endiosadas, que arranca con dos citas que explican bien la forma con la que Almudena encara la vida.

Una del cantante Pablo Alborán, con la que anima a apreciar la vida, disfrutarla, compartirla al máximo y, en definitiva, a beberla día a día, y otra de la prestigiosa periodista norteamericana Oprah Winfrey, con la que también reivindica los sueños y la necesidad vital de luchar por ellos siempre desde el poder de la pasión.

El poemario es también un emotivo recuerdo a sus abuelos Domingo y Nena -ya fallecidos, pero que Almudena sigue echando mucho de menos-, a quienes ha querido dedicar estas páginas por ser sus raíces, su enseñanza y su camino en la vida. Y a modo de ofrenda, les entrega esta oda:

"Abuelos guiad estos versos,

sed timón y faro de las emociones que en estas páginas

han destilado mis manos.

Os quiero con un amor que no sé dibujar en palabras"

Ya en su portada, el poemario dice mucho de lo que puede encontrarse el lector. En ella, la escritora quiere reflejar la magia de la noche con las estrellas, una luna blanca y resplandeciente que coge el título de "A la noche le puse alas", y una mujer soplando todas las emociones que se esconden en los versos para que el leedor las haga suyas mientras recibe toda la energía de la luna.

Una tapa de presentación, además, que entremezcla el color anaranjado, con marrones y azules que identifican un medio océano o un medio desierto para mostrar la soledad y la grandeza de ambos, y en la que tampoco falta un hada de las de toda la vida, el personaje favorito de Almudena desde su infancia cuando leía sus primeros cuentos, por la magia que desprende pero también por su sentido protector.

-¿ Y por qué la noche para escribir?, pregunta LA RAZÓN a la también autora de "Azules te sueño", una miscelánea de prosa y verso con la que debutó en esto de la literatura.

- Durante la noche magnificamos los sentimientos, recordamos la trayectoria del día, un momento, la vida. En la noche está todo en silencio, en calma, se ven las estrellas y la luna. Y nos sentimos muy pequeños ante tanta grandeza , pero también "Quijotes" venciendo a los molinos de aire.

-¿Es de poco dormir entonces?

- La verdad es que no duermo mucho. Pero es que en la soledad de la noche es cuando despliego mis alas libremente y sobrevuelo universos, emociones, sentimientos, vidas. Es en la oscuridad de la noche donde todo parece desordenado e intento encajar las cosas como si fuera un mecano, para que todo fluya y vaya en conjunción con la magia de las letras.

-La vida misma late con fuerza en estos poemas

- Sobre todo las emociones humanas, como la valentía, el amor, la esperanza, la indecisión, la duda, la ternura o la belleza. Es la vida en todas sus formas. Y es lo que quiero hacer con los corazones de los lectores, que latan con estos versos y que al leerlos sientan cómo las emociones crecen en su interior y les transportan.

"Me abrasa la impaciencia

tan lejana de tu calma.

Destierro el sonido que no refleja el murmullo

de tus amaneceres lentos.

Aferro mi cuerpo a la tibieza de tus brazos,

sendero en mis piernas, desafío y reclamo".

(Extracto del poema "Olor en la memoria")

Almudena Ojosnegros posa con un ejemplar de su nuevo poemario "A la noche le puse alas"
Almudena Ojosnegros posa con un ejemplar de su nuevo poemario "A la noche le puse alas"Rodrigo OrtegaLa Razón

Almudena ha seleccionado los poemas de este libro con paciencia entre muchos otros escritos en esas noches de inspiración que dice tener guardados y recopilados, que ha ido escribiendo en los últimos tiempos priorizando aquellos que "encajaban" en lo que pretende transmitir.

Todos ellos cuentan con un sugerente título o encabezamiento que ya de por sí da una idea de lo que está por venir en forma de versos en libertad.

En estas líneas, en una especie de juego, este periódico pregunta a la autora por estos titulares para intentar profundizar un poco más en sus pensamientos y reflexiones pero, sobre todo, para conocer más a la persona y la historia que hay detrás.

- "Olor en la memoria". ¿A qué huele la memoria?

-Me huele a vainilla. Es un olor que me acompaña siempre. Es entrañable, acogedor.

- "Septiembre". ¿El final del verano?

-Septiembre es el comienzo de muchas oportunidades. De empezar a imaginar expectativas y sueños y también de ponerse en marcha para conseguirlos.

- "Llegas". ¿Y después qué?

- La plenitud, porque cuando llega algo que deseas te sientes feliz y colmado porque ha aparecido lo que tanto esperabas.

-"Siempre contándome". ¿Qué le gustaría que le contaran?

- La vida, las historias y emociones de cada persona, Me gusta que me cuenten lo que les mueve y late. Lo que les apasiona, sus miedos... la vida. Ahí conoces a la persona, pero además es inspirador para otras historias.

- "Me sorprende". ¿Le gustan las sorpresas?

Sí, mucho. Aunque me suelo sentir muy abrumada cuando lo hacen.

- "Vida". ¿Corta y dura?

- Para mi la vida es agradecimiento. Cada día que me levanto doy las gracias por todo, por poder vivir la vida y compartirla un día más.

- "Amigos". Dicen que se cuentan con los dedos de una mano.

- Sí, es verdad. Para mi los amigos son muy importantes. Me siento muy afortunada por tener lo que tengo, ya que me hacen poner los pies en la tierra. Aunque muchas veces les tengo más abandonados de lo que quisiera por esta afición mía por escribir, pero lo son todo en mi vida.

"A la noche le puse alas". ¿Y voló?

- La noche vuela. Es el momento del silencio, la calma, el poder estar contigo misma y entonces tu mano empieza a transcribir y surgen las alas para plasmar las emociones.

- "A veces la vida va en serio". ¿Sólo a veces?

- No somos conscientes, pero debemos aprender a darnos cuenta de que vivir es ahora mismo porque cuando la vida te pone en un brete, que lo hará en cualquier momento, es cuando piensas que esto de la vida no es ninguna broma y que va en serio, que da reveses duros y te frena. Por eso voy a aprovechar cada momento y a las personas que quiero, porque la vida pone pruebas y hay que aprender a superarlas para poder vivir.

- "Todo nos lleva". ¿Hacia dónde?

- Eso me pregunto yo muchas veces. Hacia donde me lleva todo esto. Y no es fácil de resolver. Intento ir hacia mis metas, pero muchas veces son los vientos de la vida que no controlamos los que te llevan por un sitio u otro.

- "Antes de que el tiempo se extinga". ¿Qué es lo que quiere hacer?

- Aprovechar más el tiempo con los míos, escribir más y leer todos los libros que nunca me dará tiempo a leer en una vida entera.

- "Me salvas". ¿De qué debemos salvarnos?

- Del odio, de la indiferencia, de la incomprensión. Todos debemos querernos más y odiarnos menos. Es algo que está muy de actualidad, por desgracia. La gente está muy dolida con la vida e irascible. No sé si es la inmediatez de todo que no nos deja detenernos a mirar, escuchar y sentir, que es fundamental. Y no juzgar nunca, es otra de las cosas que se deberían salvar.

- "Llueve". Dicen que el agua purifica.

- El agua da vida y todo crece. Además, me gusta "mojarme", pero también ver la lluvia detrás de un cristal. Es nostálgico desde un punto de vista positivo. Me gusta la lluvia y sentir la vida.

- "Eternidad"-"Fugacidad". Palabras tan distintas pero a la vez tan unidas. Decía Homero que "Qué es la vida eterna sino aceptar el instante que viene y el que se va".

- Me gustaría que muchos de los momentos que vivimos sean eternos, pero la vida es fugaz. Ahora estamos aquí hablando y en un rato nos iremos. Pero lo fugaz es eterno si lo guardas en el corazón y esa es la magia de la vida. A veces la fugacidad es buena, ya que necesitamos que las cosas sean fugaces para volverlas a desear.

- "Se esconde". ¿De qué nos escondemos en la vida?

- Nos escondemos de los miedos que tenemos y de no poder o querer enfrentarnos a ellos. De perder a alguien de la familia es de lo que más me escondo ya que no quieres pensarlo. Pero soy una persona transparente y pasional, para bien y para mal, y se me ve bien por donde voy.

Almudena junto al Premio Nadal, Alejandro Palomas, en Villa Serendipia
Almudena junto al Premio Nadal, Alejandro Palomas, en Villa SerendipiaVilla SerendipiaLa Razón

Un lustro de Villa Serendipia

Almudena Ojosnegros presentará oficialmente este poemario a las siete y media de la tarde del próximo 15 de diciembre con su gente, los lectores de Villa Serendipia, y en su hogar, esta fortaleza de las letras que decía antes, desde cuya almena esta inquieta librera transmite su pasión por la lectura e invita a soñar a todos con sus historias.

Un proyecto literario que ya ha cumplido un lustro, y que ha conseguido que la peña más fiel de Castilla se esté dando a conocer en todo el mundo, y no solo como un destino de buen comer y mejor beber, sino como un lugar marcado en rojo dentro del panorama literario al que los escritores quieren venir a presentar sus libros y compartirlos con los lectores.

Y no cualquier escritor, por cuanto por Villa Serendipia han pasado ya dos ganadores del prestigioso Premio Nadal de literatura, como Alejandro Palomas y Víctor del Árbol, además de otros muchos novelistas de gran calidad -una media de unos veinte al año- que se están abriendo paso con fuerza.

Es el caso de Juan Laborda, Alejandro Corral, Arantza Álava, Nieves Muñoz, Macu García o Carlota Suárez, entre otros, que han compartido sus inquietudes literarias por este espacio cultural, además de autores locales como Luis María Martín, e incluso jóvenes poetas, porque la poesía tiene también un gran hueco en este proyecto, como la vallisoletana Miriam Villabón.

Villa Serendipia sigue creciendo y abierta a cualquier oportunidad que surja que permita abrir nuevos horizontes que enriquezcan más a los peñafielenses y al municipio, además de aportar su granito de arena a la cultura fomentando la lectura y ofreciendo un servicio indispensable a los que viven y trabajan en el medio rural.

Porque ahora que se lleva tanto tiempo hablando de despoblación y retodemográfico, conviene destacar que son iniciativas como esta las que ayudan de verdad a fijar población y poner en valor la calidad de vida y bienestar que hay en los pueblos.

Y mientras no deja de soñar en proyectos que tiene en mente, como por ejemplo, una revista cultural e incluso poner en marcha una Feria Literaria en Peñafiel, Almudena aprovecha cada noche, además de para escribir, para recomendar libros, historias y escritores a través de las redes sociales mediante mensajes, comentarios y fotos en los que trata de «ir más allá» y enganchar más si cabe a la lectura en el medio rural.

Jornada literaria de verano, en la terraza de Villa Serendipia
Jornada literaria de verano, en la terraza de Villa SerendipiaVilla SerendipiaLa Razón

Próximas actividades

Almudena, aparte de su poemario, tiene previstas nuevas presentaciones de libros y coloquios literarios en Villa Serendipia. Así, este miércoles 29 de noviembre estará con los lectores la escritora de novelas Alicia Vallina, que presentará su último trabajo: "La criolla del Amazonas".

Y el 1 de diciembre, participará en un encuentro enoliterario en la Casa de la India de Valladolid, que reunirá a escritores y amantes de la literatura en una velada única organizada por la Ruta del Vino de Rueda, donde contará su proyecto en Villa Serendipia.

Una cita en la que también participarán otras librerías de prestigio de Valladolid como La Perecquiana, especializada en libros viejos y diálogos vivos con escritores; y Maxtor, un clásico de referencia con larga trayectoria en la capital del Pisuerga.

También tendrá su espacio en este evento el escritor, director y actor de cine, televisión y teatro, Sergio Villanueva, que ofrecerá una charla magistral sobre cómo la escritura se convierte en una herramienta esencial para expresar lo que no se puede silenciar.