Cultura

El juez mantiene el veto de Colau al Hermitage

La Justicia rechaza el recurso de los promotores del museo

El emplazamiento del hipotético Hermitge en Barcelona
El emplazamiento del hipotético Hermitge en BarcelonaEuropa Press

El Juzgado Contencioso Administrativo 4 de Barcelona ha rechazado la petición del Hermitage para suspender provisionalmente el acuerdo de la Comisión de Gobierno de Barcelona que denegó el convenio que el Puerto de Barcelona quería establecer con el proyecto del museo en la Nueva Bocana.

En un auto consultado por Europa Press, el juez descarta la petición de medidas cautelares que el Hermitage había reclamado en su recurso, con el que quería suspender provisionalmente el acuerdo del consistorio.

El Hermitage también pidió suspender la modificación del plan especial de la Nueva Bocana del Puerto --en base a la cual el Ayuntamiento denegó el convenio--- “si se interpreta, como hace dicho acuerdo, que este precepto atribuye al Ayuntamiento de Barcelona la facultad discrecional de vetar los proyectos culturales concretos que la Autoritat Portuària de Barcelona proponga implantar en el Edifici Central”, pero el juez lo ha rechazado igualmente.

Tras un dispendio de más de tres millones de euros y una larga y dura batalla con Colau, los promotores del Museo Hermitage en Barcelona decidieron en enero renunciar a instalarse en la capital catalana. Los impulsores paralizaron todas las inversiones que tenían previstas hacer y anunciaron que se limitarían a hacer frente judicialmente al Ayuntamiento para conseguir una indemnización por los daños causados.

Las trabas impuestas desde el primer momento por Colau para instalar una franquicia del icónico Museo Hermitage de San Petersburgo en el barrio de la Barceloneta, frente al mar, terminaron con la paciencia de sus impulsores, articulados en torno a la sociedad Museo Hermitage Barcelona (controlada en un 80% por Varia; el 20% restante, corresponde a Cultural Development), que desistieron y renunciaron al proyecto.

En este sentido, el proyecto se le escapa a Barcelona y puede poner rumbo a alguna de la veintena de capitales de provincia españolas que ya han mostrado interés, con Sevilla, Madrid o Málaga a la cabeza, o a alguna de las ciudades europeas que también pueden albergarlo. El Hermitage, tras más de una década de intentos frustrados, de los cuales siete años de enfrentamiento con Colau, puso prácticamente punto y final a un proyecto que contemplaba inicialmente una inversión de más de 50 millones de euros y la previsión de 850.000 visitantes el primer año. Sí queda algún resquicio, según reconocen los promotores, si hay cambio de gobierno en 2023 o se produce de aquí a entonces un giro en los planteamientos de la alcaldesa, algo que se antoja complicado.