El PSC se desmarca de las negociaciones para investir a Sánchez y vota en contra de la amnistía en el Ayuntamiento de Barcelona

No han habido sorpresas y el PSC ha terminado con cualquier incertidumbre y especulación, votando en contra de las propuestas a favor de la amnistía. La declaración institucional se aprobó con el apoyo de Junts, Barcelona amb Comú i ERC. El PSC, el PP y Vox votaron en contra.

No se aprobó en cambio, una propuesta de declaración institucional presentada por el PP en contra de la amnistía, en la que el PSC se mostró contrario. Había una tercera propuesta de declaración institucional, propuesta por los socialistas, en contra de la “estrategia de confrontación” del PP (en palabras del resto de grupos, menos Vox, pero finalmente se retiró y no se votó.

Los socialistas retiraron del orden del día este mismo viernes su proposición a favor del diálogo y la convivencia (sin mencionar la amnistía) tras anunciar el jueves por la tarde que votarían en contra, y defendieron su posicionamiento contrario en el debate de ambas proposiciones.

De esta manera, los socialistas se desmarcaron por completo de las negociaciones del PSOE con las formaciones independentistas catalanas, en las que la amnistía por el “procés” es “conditio sine quan on” para Junts y ERC.

“Estamos dispuestos a explorar todo lo que esté dentro de la Constitución, pero no daremos ningún paso hacia la ruptura”, justificó la primera teniente de alcalde socialista, Laia Bonet, que también criticó que el Parlament avale condicionar la investidura del candidato socialista, Pedro Sánchez, al referéndum.

El líder de Junts en Barcelona, Xavier Trias, vio necesario que Barcelona se posicione de manera clara sobre esta cuestión y ha lamentado el voto contrario del PSC, que ha dicho que no esperaba, y les ha pedido marcar su filosofía: “Deben decidir qué quieren para Cataluña, qué quieren que sea Cataluña y hacer oír su voz”. Mantuvo un contundente rifirrafe con el máximo edil popular, Daniel Sirera.

Por su parte, el líder de ERC en el Ayuntamiento, Ernest Maragall, afirmó que con esta proposición están “tendiendo la mano al Estado, y avisó que no se trata de influir en las negociaciones, sino expresar la voluntad democrática de la mayoría de los ciudadanos, afirmó.

La líder de BComú y ex alcaldesa, Ada Colau, tildó de “sobreactuación” la presentación de estas proposiciones por parte de los grupos implicados en las negociaciones para la investidura y dijo que no entiende el ‘no’ del PSC, además de pedir calma y mantener las conversaciones con discreción. Se mostro beligerante con la postura del grupo socialista, y muy favorable a medidas como el catalán en el Congreso de los Diputados.

Sirera recordó a Collboni, que “su partido estuvo a la altura de las circunstancias” en 2017, le invitó a acudir a la manifestación del 8 de octubre en Barcelona en contra de la amnistía, y consideró que tramitar una ley es saltársela por posicionamiento político.

Por último, el líder de Vox en Barcelona, Gonzalo de Oro Pulido, reprochó a Junts y ERC de “usar Barcelona como moneda de cambio” para la investidura y de generar inestabilidad, división y odio, y ha acusado a los socialistas de ser cómplices de los independentistas.

Pese a las negociaciones para investir a Sánchez que incluyen la amnistía, el PSC votó en contra en el debate de política general y tuvo un valor simbólico: carece de efectos jurídicos, pero sí permitió ver cómo se posicionaron los partidos en torno a asuntos políticos importantes. Y los socialistas «no darán apoyo a ninguna otra propuesta de resolución» sobre el conflicto político a parte de la suya, que pidieron priorizar el diálogo dentro de la Constitución.

Además, en un gesto poco frecuente, PSC y PSOE emitieron un comunicado a última hora de la tarde para frenar las aspiraciones independentistas. «El PSOE y el PSC reiteran su voluntad de apostar por el diálogo como la únicaforma de garantizar el progreso y la convivencia en Cataluña», expone el comunicado, sin hacer referencia ni a amnistía ni a referéndum. «El camino es el de la convivencia y la cohesión, el entendimiento y el progreso económico y social de Cataluña y del resto de España, siempre dentro de la Constitución», añade el texto de los socialistas.

En concreto, la propuesta de resolución pactada por ERC y Junts, además de la CUP, señala «la necesidad de una Ley de Amnistía para dejar sin efecto lo que se había tipificado como infracción penal o administrativa, en relación a la defensa del ejercicio del derecho de autodeterminación de Cataluña». Además, republicanos y posconvergentes han pactadootro punto que indica que no darán apoyo a Pedro Sánchez si no se compromete a generar las condiciones para celebrar un referéndum.