Rodalies

Rodalies ya no será gratuito en Barcelona: descubre cuánto tendrás que pagar a partir de julio

El título será interoperable con otros sistemas de transporte público de España

Rodalies tardará horas en normalizarse por la "gravedad" y "dispersión" de los daños
RodaliesEnric FontcubertaAgencia EFE

A partir del 1 de julio, los billetes de Rodalies y media distancia de Renfe en Barcelona tendrán un coste de 20 euros al mes, poniendo fin a la gratuidad de este servicio. Así lo ha confirmado el secretario de Mobilitat i Infraestructures, Manel Nadal, durante su comparecencia en la Comisión de Territorio del Parlament.

Nadal ha anunciado que las Autoridades del Transporte Metropolitano (ATM) crearán un título propio que será interoperable con otros sistemas de transporte público de España. "Esto lo acordaremos con el Estado y que nos lo financie", ha señalado, destacando que la Generalitat negociará con el Gobierno central para garantizar su implementación.

Cambio en las bonificaciones

El secretario de Movilidad ha recordado que la Generalitat aumentará su aportación en los billetes bonificados del 20% al 30%, justo cuando el Gobierno reduzca la suya del 30% al 20%. Esto permitirá mantener los descuentos actuales en metro y autobuses de Barcelona más allá del 1 de julio, asegurando que los ciudadanos no sufran un aumento repentino en sus gastos de transporte.

Nadal ha defendido una reducción "gradual" de las bonificaciones, argumentando que los recursos son "limitados" y que es necesario priorizar la mejora del servicio. "No se pueden aplicar bonificaciones al mismo tiempo que se demanda un incremento de los servicios", ha advertido. En este sentido, ha señalado que la demanda de transporte público ha crecido entre un 30% y un 40% en comparación con el año anterior, en parte debido a que cada vez más jóvenes optan por no sacarse el carné de conducir.

El Govern mantiene su compromiso con la integración tarifaria y tecnológica del sistema de transporte público, proceso que culminará en 2025. Nadal ha subrayado la necesidad de actualizar las tarifas al menos en función del IPC, argumentando que no hacerlo supondría una pérdida de recursos de 30 millones de euros, especialmente tras años de congelación de precios.