Polémica
Vídeo: "Puta España" y "Quemar una bandera española es un acto de amor", así es el discurso de la CUP en Girona
La Asamblea Territorial del partido en las comarcas gerundinas publica un vídeo lleno de polémica
La Asamblea Territorial de la CUP en las comarcas de Girona ha publicado un vídeo en la red social X en el que un representante de la formación anticapitalista defiende la quema de la bandera española como un gesto de “amor a la libertad”. Las imágenes, que han generado polémica en redes, combinan el discurso del militante con secuencias de simpatizantes de la CUP quemando una bandera de España colocada al revés.
En el vídeo, el portavoz arranca con una frase provocadora: “Quemar una bandera de odio no es un acto de odio, sino un acto de amor”. Según sostiene, se trata de “un acto de amor a la libertad”, y añade que “España no se arregla” porque “está mal desde los fundamentos”. A su juicio, la única salida posible es “la república catalana”.
El miembro anima a sus seguidores a mantener viva la movilización independentista: “Quemar la bandera española es lo mínimo que podemos hacer. No se puede pedir respeto a quien no respeta”, asegura. En su intervención también llama a los catalanes a “seguir luchando por la independencia con fuerza, inteligencia y esperanza”, porque —dice— “acabaremos ganando”. El discurso concluye con un insulto explícito al Estado: “Muy buenos días a todos, y puta España”.
Las imágenes han sido difundidas desde el perfil oficial de la CUP en las comarcas de Girona, una de las zonas donde tradicionalmente la formación ha tenido más arraigo, especialmente en el ámbito municipal.
Una formación en horas bajas
El vídeo aparece en un momento de profunda decadencia para la CUP, la extrema izquierda independentista y antisistema de Cataluña, que atraviesa una de sus etapas más grises desde su irrupción en el Parlament hace más de una década. Con un electorado testimonial, escasa representación institucional (cuatro diputados en el Parlament y la alcaldía de Girona como máximos logros) y un discurso anclado en el maximalismo ideológico, la formación ha perdido buena parte del protagonismo que tuvo durante el ciclo del procés.
Mientras tanto, el panorama político catalán ha cambiado de manera significativa. Los jóvenes muestran hoy un interés decreciente por el independentismo y una mayor inclinación hacia discursos más pragmáticos, conservadores y alejados del independentismo. Los partidos "de moda" son Aliança Catalana y Vox (estos sobre todo entre los jóvenes), ambos de derecha dura. Si bien Aliança tiene un discurso identitario muy fuerte, antiespañolista e independentista, según encuestas la mitad de su electorado en unas hipotéticas elecciones no es independentista pero votaría al partido por su postura con la inmigración y su islamofobia.
La CUP, lejos de conectar con las nuevas sensibilidades, se ha encerrado en un mensaje cada vez más marginal, que apenas genera adhesiones fuera de sus círculos militantes más radicalizados.