Astronomía

¿Qué fue de los otros dos cometas similares al 3I/ATLAS? Esta fue su trayectoria

Científicos hallan puntos en común entre ATLAS y los mensajeros cósmicos de 2017 y 2019

¿Qué fue de los otros dos cometas similares al 3I/ATLAS? Esta fue su trayectoria
¿Qué fue de los otros dos cometas similares al 3I/ATLAS? Esta fue su trayectoriaLa RazónLa Razón

El 3I/Atlas mantiene a astrónomos y aficionados igual de expectantes desde que ingresó en el sistema solar y que cruzó el perihelio este pasado 29 de octubre. Aunque esta, no es la primera vez que un cometa interestelar se acerca tanto, ya que en 2017 y 2019 dos cuerpos celestes extrasolares también lo hicieron: El 1I/Oumuamua y el 2I/Borisov.

¿Qué es el 3I/Atlas?

El 3I/ATLAS es el tercer objeto interestelar confirmado, descubierto el 1 de julio de 2025 por el sistema de sondeo ATLAS. Este proviene de fuera de nuestro Sistema Solar y, aunque la mayoría de los astrónomos lo consideran un cometa natural, sus características inusuales han suscitado especulaciones. Estudiarlo podría proporcionar información muy valiosa sobre otros sistemas estelares y su comportamiento.

Los otros dos visitantes interestelares

El primer mensajero interestelar

Un descubrimiento sin precedentes sacudió al mundo científico cuando un telescopio en Hawái detectó un objeto que no pertenecía a nuestro sistema solar. Bautizado como Oumuamua, que en hawaiano significa “mensajero de tierras lejanas que llega primero”, este cuerpo celeste se convirtió en el primer objeto interestelar identificado por la humanidad.

El hallazgo fue realizado por Robert Weryk utilizando el telescopio Pan-STARRS, y rápidamente despertó el interés de astrónomos de todo el planeta. Su forma, inusual y alargada (similar a la de un cigarro gigante), medía hasta 400 metros de largo, con una proporción diez veces mayor que su ancho, algo nunca antes había sido visto en cometas o asteroides de nuestro sistema solar.

Trayectoria del cometa Oumumuamua a través del sistema solar
Trayectoria del cometa Oumumuamua a través del sistema solarResearchgateResearchgate

Los estudios iniciales indicaron que Oumuamua tenía una estructura rocosa y metálica, sin rastros de hielo ni agua, y que su superficie presentaba un tono rojizo, probablemente causado por la irradiación de rayos cósmicos durante cientos de millones de años de viaje por la Vía Láctea. Se estima que vagó más de 100 millones de años antes de atravesar nuestro vecindario cósmico.

El objeto giraba sobre su eje cada 7,3 horas, variando su brillo en un factor de 10, una oscilación mucho mayor a la de cualquier asteroide o cometa conocido. Durante su breve paso por el sistema solar, ‘Oumuamua se acercó a unos 3.862 millones de kilómetros del Sol antes de continuar su viaje hacia el espacio interestelar, dejando tras de sí una mezcla de asombro, misterio y nuevas preguntas sobre los confines de nuestra galaxia.

2I/Borisov: el segundo visitante interestelar

Dos años después de la histórica detección de ‘Oumuamua, un nuevo visitante proveniente de las profundidades del espacio volvió a captar la atención de la comunidad científica. Se trataba de 2I/Borisov, el segundo objeto interestelar identificado en nuestro sistema solar, descubierto por el astrónomo aficionado Gennady Borisov, originario de Crimea.

El hallazgo se convirtió rápidamente en un fenómeno mundial. A diferencia de ‘Oumuamua, cuya forma y naturaleza generaron debate, Borisov mostró rasgos más familiares, como una cola de gas y polvo, típica de los cometas.

Cuando se confirmó su procedencia interestelar, la NASA dirigió el telescopio espacial Hubble hacia el cometa, obteniendo imágenes en octubre y diciembre de 2019 mientras este atravesaba nuestro sistema solar a una velocidad de 177.000 kilómetros por hora. “Las imágenes mostraron una gran cantidad de polvo alrededor de un núcleo brillante, aunque este era demasiado pequeño para ser observado por el Hubble”, señaló la agencia espacial estadounidense en un comunicado de 2020.

Trayectoria del cometa Borisov a tráves del sistema solar
Trayectoria del cometa Borisov a tráves del sistema solarWikipediaWikipedia

Los análisis del Hubble y otros observatorios revelaron que el núcleo del cometa estaba compuesto por hielos y partículas de polvo, una mezcla similar a la de los cometas del sistema solar pero con una firma química ligeramente diferente, ya que se formó bajo condiciones distintas. Los astrónomos estiman que 2I/Borisov podría ser más antiguo que el propio Sol, un viajero milenario que se formó en los primeros tiempos de la Vía Láctea.

El 3I/ATLAS: ¿Se parece a sus hermanos?

Tal y como su predecesor, 2I/Borisov, el 3I/ATLAS tiene una estructura de rocas y hielo. Fue esta la que a medida que se acercó a la estrella, empezó a desprender gases y polvo que las sondas de la ESA detectaron a gran distancia.

Dónde ver el 3I/ATLAS

Los astrónomos prevén que el cometa volverá a ser visible a inicios de diciembre, cuando se ubique nuevamente dentro del campo de observación de los telescopios espaciales. Durante su trayecto, pasará a unos 270 millones de kilómetros de la Tierra, una distancia segura que no representa ningún peligro para la vida humana.

Lamentablemente, debido a su débil luminosidad y a su trayectoria, el cometa no podrá observarse desde la superficie terrestre, sino únicamente a través de telescopios orbitales capaces de capturar imágenes detalladas de su paso.