Agreden a tres funcionarios de la cárcel de Picassent

El sindicato CSIF ha alertado del “desamparo” que sufre el colectivo de trabajadores de la cárcel de Picassent (Valencia), tras la agresión ayer a tres funcionarios, que atribuye a la falta de personal,ya que denuncia que existe más de un centenar de vacantes por cubrir.

Instituciones penitenciarias ha informado de que el incidente se produjo en un módulo ordinario, durante un cacheo de celdas por el personal necesario, el jefe de servicio y dos funcionarios más, aunque reconoce que en esta prisión hay un déficit de plantilla, de unos 50 trabajadores.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha informado de que los hechos se produjeron a primera hora de la tarde de ayer, cuando el jefe de servicio del módulo 8 de la Unidad de Cumplimiento se dirigió a una celda acompañado por dos funcionarios, ante la sospecha de que algunos internos estuviesen en posesión de objetos prohibidos como teléfonos móviles o pinchos.

Al sorprenderles, los reclusos empujaron al jefe de servicio y golpearon a los funcionarios, que tuvieron que solicitar refuerzos para reducir a los presos. Los dos presos fueron trasladados a una celda de aislamiento, según han indicado las mismas fuentes de Instituciones Penitenciarias.

El sindicato, por su parte, denuncia que este suceso, al igual que otras agresiones sufridas por funcionarios de prisiones recientemente, se enmarca en un contexto de carencia de trabajadores y déficit en formación, que a su juicio debe ser presencial, adecuada a la realidad del medio y alcanzar a la totalidad de los funcionarios.

CSIF también lamenta la falta de medios materiales, como “un vestuario no apto para este trabajo o unos guantes de cacheo comprometidos por la Secretaría General y que no proporcionan”.

Asimismo, asegura que ha pedido la compra de pistolas eléctricas para su uso solamente ante estas situaciones, “que ya se está adquiriendo para las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y que se niega a los funcionarios de prisiones”.

Instituciones Penitenciarias, por su parte, reconoce que hay un déficit de entre 50 y 60 trabajadores en la plantilla de la prisión de Picassent, contemplados en las últimas ofertas de puestos de funcionarios de prisiones, entre ellas la convocatoria de 900 plazas para vigilantes y ayudantes, cuyos exámenes se realizarán el próximo fin de semana.

Esta falta de personal, indican las mismas fuentes, responde a “una situación de años sin oferta pública” que está intentándose subsanar con estas nuevas ofertas.