Lengua

Compromís califica de “injerencias” las sentencias que cuestionan su modelo lingüístico

La Generalitat valenciana resta importancia a la sentencia del TSJ que obliga a que el valenciano y el castellano se enseñe de manera proporcional

El director general de Política Lingüística, Rubén Trenzano, junto al conseller de Educación, Vicent Marzà
El director general de Política Lingüística, Rubén Trenzano, junto al conseller de Educación, Vicent Marzàlarazon

La ley del plurilingüismo de la Generalitat sale reforzada tras las cinco sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) en las que fija como criterio que el peso del valenciano y el castellano en la educación plurilingüe sostenida con fondos públicos ha de observar una “proporción razonable”. Esta es la versión acordada entre el Consell y los partidos que sustentan el Botànic que no ven problema alguno en que se haya puesto en cuestión el proyecto lingüístico de cinco centros educativos.

Mientras la vicepresidenta y portavoz del Consell, Mónica Oltra, daba la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Gobierno valenciano, restando importancia a estas sentencias porque afectan a un número ínfimo de centros del total del sistema escolar, Compromís afirmaba que incluso con “las injerencias y valoraciones pedagógicas de los Tribunales y el acoso judicial de la derecha a la Ley de Plurilingüismo, esta se ha demostrado jurídicamente incontestable”.

Oltra ha asegurado que estas sentencias avalan la ley porque no se ha elevado un recurso de inconstitucionalidad y, por tanto, ha manifestado su satisfacción porque se da por bueno el modelo elegido por la Generalitat valenciana para garantizar la competencia lingüística de los escolares valencianos, “ya que solo implican a dos centros de infantil y primaria de los 1.338 existentes” .

La diputada de la formación nacionalista, Nathalie Torres,considera que el TSJCV ha dado un “aval” a la Ley y añade que “en su propia sentencia hace una enmienda a la totalidad de sus pronunciamientos anteriores respecto a la Ley en relación a cuál tiene que ser la participación de las familias para elegir la lengua en que son escolarizados los hijos”.

Desde Compromís, han insistido en que con esta sentencia se blinda una ley que “rompe con la discriminación del alumnado por motivos lingüísticos y con los guetos en las escuelas. Es el inicio de un nuevo camino para garantizar las competencias lingüísticas del alumnado en valenciano y también para mejorar sus competencias en inglés”.

Con todo, la Abogacía de la Generalitat recurrirá las sentencias del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana que declaran nulos los proyectos lingüísticos e interculturales de dos colegios en Turís y Benigànim al doblar en algún caso el porcentaje de materias a impartir en valenciano.

Por su parte, el PPCV ha afirmado que “de nuevo los tribunales enmiendan y condenan la política de inmersión lingüística que este Consell tripartito nacionalista está llevando a cabo en las escuelas valencianas”. La vicesecretaria de política social ha asegurado que “desde el PPCV queremos que los niños estudien en valenciano y en castellano pero siempre respetando la proporcionalidad y nunca desde la imposición a la que nos tiene acostumbrado este Consell nacionalista. La Comunitat Valenciana es bilingüe y eso se debe respetar en las aulas. Además, hay que defender la libertad de los padres para que elijan la educación y la lengua en la que quieren educar a sus hijos”.

La diputada de Ciudadanos (Cs) en Les Corts Valencianes, Merche Ventura, ha pedido que se garantice la enseñanza del castellano en los colegios, respetando ambas lenguas cooficiales y apostando por un modelo lingüístico competencial. “Tal como dictan las sentencias judiciales, exigimos que, para desarrollar el proyecto lingüístico, se tenga en cuenta la realidad sociolingüista de la zona, donde las familias tienen mucho que decir”.

Además considera que las lenguas están para hablarlas y para respetarlas, no para hacer política y ha criticado que al Consell de seguir con su hoja de ruta de inmersión lingüística “copiada” de Cataluña.