Seis años y casi un millón de visitantes
El Museo Carmen Thyssen prepara una nueva exposición temporal dedicada al realismo en España
El Museo Carmen Thyssen prepara una nueva exposición temporal dedicada al realismo en España
El 24 de marzo de 2011 se cumplió un sueño compartido con la inauguración del Museo Carmen Thyssen Málaga. Como todo gran proyecto, hubo mucho esfuerzo, trabas y sacrificios detrás, pero la «generosidad» de la baronesa –según el alcalde de la localidad, Francisco de la Torre– y la «perseverancia» del regidor –según Carmen Thyssen– hizo posible la apertura de este espacio museístico que el pasado viernes celebró su sexto aniversario con unas jornadas de puertas abiertas y que ya tiene apuntado una nueva cita en el calendario: la inauguración el 6 de abril de la exposición temporal «La apariencia de lo real. Cincuenta años de arte realista en España (1960-2010)».
- Cuatro espacios
Esta próxima propuesta está protagonizada por tres generaciones de realistas españoles, nacidos en las décadas de 1930 –Amalia Avia, Julio y Francisco López Hernández, María Moreno, Antonio López, Claudio Bravo, Isabel Quintanilla–; 1940 –Cristóbal Toral, Eduardo Naranjo– y 1950 –Gerardo Pita, Manuel Franquelo, César Galicia–.
Si Málaga es hoy conocida como la «ciudad de los museos», un gran trozo de esa bandera le corresponde al Museo Carmen Thyssen, situado en el casco histórico de la capital de la Costa del Sol, concretamente en el rehabilitado palacio de Villalón, un edificio noble civil del siglo XVI que estaba destrozado y que ha permitido la recuperación de todo un barrio. Las cifras de visitantes desde su inauguración no han dejado de crecer. El año pasado accedieron al museo 158.567 visitantes y este año se espera que en mayo se alcance una cifra mágica: un millón de visitas. En este corto espacio de tiempo se ha consolidado como un referente turístico para la ciudad. De hecho, en 2016, aumentó la cuota de turismo internacional y nacional frente al público residente: las visitas por parte de los malagueños supusieron el 34% del cómputo global y un 19 % del número de entradas vendidas. Por su parte, la cifra de extranjeros, procedentes prácticamente de todo el mundo, principalmente de Reino Unido, Francia, Alemania y Holanda, así como de diferentes países asiáticos, africanos y norteamérica, llegó a los 48.900; el resto, público nacional procedente fundamentalmente de Madrid, Barcelona y Sevilla.
La oferta del museo está constituida por un Colección Permanente que recoge uno de los fondos más importantes de pintura española y andaluza de los siglos XIX y XX, dividida en cuatro espacios. El primero, denominado «Maestros antiguos», se encuentra situado en la antigua capilla del Palacio. La sala está presidida por una talla italiana de la primera mitad del siglo XIII. Alberga también obras de grandes maestros del siglo XIII al XVII como Ezquerra o Zurbarán.
La sección «Paisaje Romántico y Costumbrismo» muestra los grandes cambios que experimenta el paisaje como género durante el Romanticismo. Se inscriben aquí las obras de Fritz Bamberger, Manuel Barrón, Andrés Cortés y Aguilar o Genaro Pérez Villaamil. Papel destacado juega aquí Andalucía, ya que se convirtió entonces en la quintaesencia de la imagen romántica de España gracias a su pasado, su arquitectura morisca, su flamenco, sus gitanas, toros, que ocuparon la imaginación de escritores y artistas . El espacio dedicado al «Preciosismo y pintura naturalista» muestra el giro de la pintura española a mitad del siglo XIX llena de colores y realismo las obras. La figura de Mariano Fortuny cobra especial relevancia: cultivó una pintura de pequeño formato, colorista y espontánea, cuidadosa en los pequeños detalles y de tema amable.
El último de los ambientes de la Colección Permanente, denominado «Fin de siglo», acoge obras de grandes artistas de los últimos años del siglo XIX y comienzos del XX . Sorolla, Casas, Iturrino comparten espacio con Zuloaga y Julio Romero de Torres. Precisamente, el museo recibió el viernes las obras de Sorolla «Rocas de Jávea y el bote blanco» y «Patio de la casa de Sorolla», que habían estado de gira por varias ciudades europeas. El Museo también desarrolla muestras temporales de gran valor artístico. Por ejemplo, actualmente hay una muestra dedicada a «Japón. Grabados y objetos de arte». Contiene obras de artistas sobresalientes del período Edo, pertenecientes al Museo de Bellas Artes de Bilbao.
Durante estos seis años, el Museo ha apostado por «la innovación tecnológica», con la incorporación de una nueva web más accesible que ha tenido en 2016 un total de 176.755 visitas. Asimismo, la tienda se ha abierto al comercio electrónico y se ha instalado wifi gratuito en todos los espacios. Igualmente se han puesto en marcha iniciativas para llevar el museo a los barrios de Málaga, así como programas educativos. En el marco del quinto aniversario, y con el objetivo de fidelizar a los más pequeños y sus familias, se puso en marcha la iniciativa «Nacid@s 2011», diseñada para acercar al Museo a los niños que nacieron el año de su inauguración.